Reggie Jackson en busca de la rodilla perdida

Reggie Jackson no jugó la pasada temporada, su lugar lo ocupó un jugador mermado que extrañamente tenía su mismo nombre y mismo aspecto. El Jackson que conocemos era una amenaza tanto exterior como interior, uno de los mejores jugadores en los momentos finales y un jugador que, pese a que amasaba el balón en demasía, podía involucrar a todos sus compañeros y ser positivo en pista. El año pasado no fue el año de Jackson, y con la lesión que sufrió en su rodilla, causada por una tendinitis, Jackson se convirtió en un jugador que retenía y retenía y provocaba que los segundos pasaran y nada ocurriera, lo que provocó que Ish Smith terminara jugando mas que él.

Después de que todos los rumores de traspaso parezcan finiquitados, el base afronta la recta final de su larga recuperación, y Van Gundy no podría estar mas contento:

«Ahora mismo Jackson está en Los Ángeles terminando su recuperación con uno de nuestros fisioterapeutas, Mark Cranston y otro doctor. Ellos se han pasado todo el verano cuidando de Jackson. Él tiene que ser capaz de creerse que será capaz de hacer todo lo que hacía antes de su lesión, y de momento lo estamos consiguiendo».

«Reggie se lesionó durante el training camp pasado y quiso volver, al igual que nosotros quisimos que volviera, pero nunca creímos que estaba al 100%«.

«Él está creyendo mucho en su proceso de recuperación, y creemos que su estado de ánimo es el óptimo para que vuelva a ser el de antes. No hay duda que él se sabe entre los diez mejores bases de la liga».

Reggie Jackson, de 27 años, encara su tercera temporada completa con los Pistons, y parece que quiere erigirse como el líder de un equipo bastante falto de experiencia. Con las incorporaciones de este verano, los Pistons han dado un salto en este aspecto, y el hecho de tener de nuevo a un Jackson sano, podría ser otra de la mayores noticias que la Motown ha recibido esta postemporada.