Justin Anderson, obsesionado con la lucha de los Playoffs

Justin Anderson encarna todos los valores que hacen de un jugador el compañero perfecto. Pese a ser solo un rookie, el alero de los Mavericks ha sabido aceptar y amoldarse al rol que se le ha asignado en cada momento de la temporada. A pesar de ser seleccionado en un puesto bajo del pasado draft, Anderson ha demostrado que tiene aptitudes (sobre todo atléticas) muy a tener en cuenta de cara al futuro. De su actitud simplemente no se debe reprochar nada, ya que ha estado siempre animando a los suyos desde el banquillo y lo ha dado todo sobre el parqué cuando le han dado la oportunidad.

En estos instantes tan cruciales del año, las lesiones han permitido a Justin acumular más minutos en la rotación del equipo texano. En concreto, la ausencia de Parsons y la falta de resultados positivos impulsaron a Rick Carlisle a colocar al novato en el quinteto inicial, un lugar del que no se ha movido en las últimas siete jornadas.

«Estoy muy feliz por estar encontrando un buen ritmo. Afortunadamente estoy en un buen lugar para ayudar a nuestro equipo, pero al mismo tiempo queremos asegurarnos de que al final del partido tenemos más puntos que el equipo contrario. Hacemos un buen trabajo y queremos continuar compartiendo el amor en la cancha de la forma en que lo he estado haciendo«, asegura Anderson.

Su irrupción en la formación titular no le ha podido sentar mejor a los de Dallas, ya que atesoran un récord de seis victorias y una sola derrota. En cuanto a sus números, promedia 8,3 puntos y 7 rebotes. Su mejor actuación en este sentido fue la que realizó el pasado viernes en el triunfo ante los Grizzlies, cuando logró su mejor anotación y su primer doble-doble como profesional (19 puntos y 10 rebotes).

«Creo que simplemente aporto energía y hago pequeñas cosas como rebotear y jugar duro en ambos extremos de la pista. Intento hacer las pequeñas cosas para ayudar al equipo a superar cada partido. Creo que es lo más importante que puedo hacer».

En cuanto a la frenética y encarnizada lucha que está viviendo junto a sus compañeros por entrar a los Playoffs, el joven jugador considera clave el cambio defensivo que han experimentado para alzarse a la séptima posición y tener opciones reales de ocupar la sexta plaza. Personalmente, reconoce que está viviendo esta experiencia al máximo.

«Casi todas las noches antes de irme a dormir miro si juega Utah o Memphis y me aseguro de que todavía estamos en el lugar en el que queremos estar. Esto es una locura, pienso en lo competitivo que es todo en este momento y en como todo el mundo está luchando por lo mismo».

Pese a manifestar estas sensaciones de impresión, Justin Anderson está mostrándose más maduro de lo que realmente es. Su propio entrenador se ha pronunciado al respecto asegurando que no parece un rookie y que se ha ganado su respeto y el de todos sus compañeros por todo lo que despliega en la pista. Forma una dupla defensiva muy productiva junto a Matthews y cada vez pierda más temor a la hora de lanzar a canasta. Progresos leves que están contribuyendo a que los Dallas Mavericks se acerquen al objetivo de los Playoffs.