Deyonta Davis (19 años), interior en la universidad de Michigan State se postula como uno de los mejores defensores (o el mejor) de toda esta nueva generación. Con 2.08 metros de altura y 104 kilos de peso tiene la capacidad para jugar tanto de ala-pívot como de pívot, siendo capaz de defender a la perfección a interiores y exteriores.
Sus guarismos durante esta pasada campaña han sido los siguientes: 7.5 puntos, 5.5 rebotes y 1.8 tapones en 18.6 minutos de juego por partido, acompañados por un 59.8% de acierto en tiros de campo, y un 60.5% en tiros libres, que se traducen en un PER de 24.2.
Tal y como es fácilmente apreciable, el mayor valor de Deyonta no son sus grandes números, aunque con más minutos de juego quién sabe qué podría haber logrado este año en la NCAA (16.1 puntos, 11.8 rebotes y 3.9 tapones por cada 40 minutos).
Análisis anteriores en el mock de SomosBasket: Demetrius Jackson, Ben Simmons, Brandon Ingram, Henry Ellenson
A continuación nos disponemos a analizar los puntos fuertes y débiles de Davis:
Puntos Fuertes
Tal y como hemos mencionado, la mayor baza de Deyonta Davis es su valor como defensor. Un jugador con capacidades tan innatas en este costado de la cancha que le permiten defender perfectamente a su par. No tiene miedo de salir al perímetro, por lo que resulta realmente eficaz a la hora de contener a tiradores abiertos en los cambios tras pick and pop. De entre sus cualidades físicas la que le es de más utilidad en este tipo de situaciones es fulgurante agilidad, que además de permitirle salir rápidamente al perímetro, también le facilite el superar los bloqueos para no perder a su par.
Sobre la defensa de Davis también cabe destacar su disciplina. Siempre atento, con los brazos en alto para molestar al atacante todo lo posible, imposibilitando el sentirse cómodo frente a él. Además, en caso de verse superado, nunca tira la toalla, y perseguirá a su par molestándole todo lo posible durante las finalizaciones. Es necesario destacar también su madurez como defensor, directamente unida a la disciplina previamente mencionada. Es cierto que ocasionalmente puede perder la concentración sobre la jugada, aunque es algo totalmente normal en alguien de su edad. Sabe estar con su par, observarle y actuar acorde con sus movimientos, sin caer en los amagos de tiro (a diferencia de bastantes interiores de esta camada).
Posee un desplazamiento lateral excepcional. Su carácter como defensor y sus herramientas físicas le permiten defender a otros jugadores, a priori, más ágiles que él, llegando incluso a bloquear su avance con un par de zancadas.
Con balón o sin balón, contra jugadores más altos o más bajos, más ágiles o más fuertes, Deyonta Davis es capaz de adaptarse a cualquier situación defensiva que su equipo requiera. Además, sus 2.17 metros de envergadura acompañan a la perfección a su agilidad y explosividad (que le permiten realizar diversos saltos consecutivos de forma rápida y sin perder elevación), y le han llevado a promediar este año 4 tapones por cada 40 minutos de juego.
Ofensivamente destaca principalmente por dos aspectos: su explosividad física y su nada desdeñable capacidad para jugar de espaldas a canasta (especialmente mediante hooks).
Está claro que el principla valor de Davis es su peso como ancla defensiva, pero la mismas cualidades físicas que utiliza para ser un excelso defensor le sirven también para ser un excelso jugador en el alley-oop. Su larga envergadura y su facilidad para elevarse le permiten atrapar alley-oops con mucha facilidad, siendo una gran parte de su ofensiva.
Su juego de espaldas a canasta posiblemente no sea uno de los más destacados de este Draft, pero posee un sutil y efectivo toque en su gancho que, acompañado de su envergadura y facilidad para elevarse le permite lanzar por encima de su defensor.
En cuanto a su tiro, está en vías de desarrollo, pero de lo poco que se ha visto de él ha podido ser satisfactorio. No es ni mucho menos un recurso que utilice con demasiada asiduidad como para considerarlo parte de su ofensiva, pero sí es cierto que tiene buena forma en el tiro y un juego de muñeca suave a la hora de soltar el balón.
Puntos Débiles
Hay que decir que, a pesar del potencial que Davis atesora, todavía le quedan bastantes áreas de su juego en las que trabajar. Es cierto que ofensivamente sabe aportar su granito de arena en cada encuentro, pero es el apartado en el que sin duda necesita pulir más su juego.
Desde su juego en el poste hasta su tiro de media y larga distancia, estando ambos todavía en pleno desarrollo. Tal y como hemos comentado en ambos apartados ha demostrado ciertas cosas que a día de hoy auguran un buen futuro, pero que sin embargo siguen estando incompletas, por lo que no se puede confiar en ellas como armas seguras.
Otro aspecto donde quizás necesita un cambio es en la mentalidad. Deyonta Davis tiene las cualidades para ser un jugador con un impacto increíble en la cancha, sin embargo, en multitud de ocasiones se ve absorbido por la sombra de los otros jugadores y no tiende a tomar los galones que quizá debería.
Comparación y proyección
Visto su juego y posible desarrollo debemos echar un vistazo a Anthony Davis para encontrar el hombre en el que Deyonta Davis se pueda reflejar. Joven prospect con un físico que le permite jugar con facilidad sobre el aro y que despliega un enorme talento defensivo, pero con una ofensiva incompleta aunque prometedora.
Actualmente Deyonta Davis se proyecta a salir como la elección número 13 de este Draft, pick actualmente en posesión de los Phoenix Suns.
