ANÁLISIS | Miles Bridges, nuevo hombre en Charlotte Hornets

Perfil multiusos de la nueva elección de primera ronda en Charlotte

En Charlotte se llegó al Draft con muchas incógnitas. La primera de ellas era el futuro de Kemba Walker, del cual se podía esperar incluso un traspaso la misma noche del Draft debido a que tiene mercado y aligeraría las cuentas en la ciudad de Carolina del Norte. La segunda era el jugador que sería elegido en el pick 11. ¿Habría un traspaso para subir a por algún jugador en especial?

Bueno, pues el turno de Charlotte llegó. Hubo sorpresas, como suele pasar en cada Draft. En este caso fue que Michael Porter Jr. estuviese disponible en el pick 11. El jugador que podría haber sido top 3 del Draft si no fuese por su espalda, algo que le hizo caer más de lo esperado. Y sí, los Charlotte Hornets también pasaron de él y fueron a escoger a Shail Gilgeous-Alexander, que sería traspasado rumbo a Los Angeles Clippers por Miles Bridges (pick 12) y dos segundas rondas del Draft de 2019.

Bridge no era una obsesión para Charlotte. Ésta es, quizás la mayor conclusión que podemos sacar de su elección. Además, la gerencia tuvo muy claro que Los Ángeles Clippers estaban dispuestos a dar algo a cambio de Gilgeous-AlexanderPor otra parte, fue extraño también que traspasaran al base que habían escogido cuando era precisamente el puesto de playmaker el que más necesario era reforzar.

Sin embargo, que no fuera una obsesión no significa que no se confíe en Bridges, todo lo contrario. Además, el intercambio entre segundas rondas que permitió a Hornets quedarse con Devonte Graham, un base, provocó que la jugada les saliera redonda si tenemos en cuenta las posiciones a reforzar.

¿Quién es Miles Bridges?

Formado en la universidad de Michigan State, en la que jugó los dos años, se trata de un jugador muy atlético al que le gusta atacar el aro. Empezando la jugada desde fuera, amenaza con su fuerte primer paso y acostumbra a finalizar él mismo. Su fuerza física es vital en su juego. No es su única arma ofensiva, ya que su tiro de tres es bueno y en progresión ascendente, si bien no es un aspecto en el que, hasta ahora haya decidido especializarse. Es decir: tira bien, pero no es un shooter, no tira tantas veces como para ser diferencial desde más allá de la línea de triple.

Además, es un jugador que no se borra en defensa, traslada a este apartado toda su intensidad y, para su edad, no tiene una mala lectura defensiva. En palabras del propio Mitch Kupchak:

“Es capaz de defender hasta cuatro posiciones, sino incluso todas”.

Y sin duda el potencial para ello lo tiene, pero no desde el primer momento. La NBA no es la Liga Universitaria y puede que su paso lateral se vea comprometido ante rivales tan veloces como los que se va a enfrentar ahora, pero tiene condiciones y ética de trabajo para crecer.

En la Summer League nos está dejando una muestra de lo que puede llegar a ser. El torneo veraniego no es algo sobre lo que se puedan sacar conclusiones, pero sí se podemos hacernos una idea de lo que está por venir. Y lo que nos está mostrando es un jugador que sabe rendir aún sin llevar la responsabilidad ofensiva (esta ha recaído sobre Willy Hernángomez y Dwayne Bacon, principalmente), con mucha intensidad y que sabe dar la cara cuando es necesario que dé un paso adelante.

Quizá Miles Bridges no sea un jugador al cual darle las llaves de una franquicia, sobre el que se pueda hacer un equipo a su alrededor, pero sí que puede ser un muy buen complemento, uno de esos jugadores que son muy importantes y que pueden sumar desde el primer minuto. Y hay muchas ganas de verlo ya en la NBA.