Jacob Evans, más versatilidad para los Warriors

Golden State escogió a un gran jugador para su esquema en el puesto 28

Golden State Warriors logró hacerse con otra gema para seguir con el proceso de rejuvenecimiento de su plantilla. Una de las principales prioridades de cara al verano era conseguir jóvenes talentos para asegurar el futuro de la franquicia y todo comenzaba con una buena elección en el Draft. Los Warriors sopesaron la posibilidad de hacer algún traspaso para escalar posiciones pero por suerte para ellos, el jugador al que deseaban seguía disponible cuando Adam Silver llamó a su puerta para que diesen un nombre. Con Jacob Evans de Cincinnati se cubren las espaldas ante una más que previsible salida de Nick Young y con un Patrick McCaw que es agente libre y que podría marcharse de la franquicia.

Golden State necesitaba reforzar los puestos de base, escolta y alero y con Evans suman una pieza versátil de 1,98 metros de altura y con más de dos metros de envergadura. Está capacitado para defender las posiciones del uno al tres y proporcionará a la plantilla una buena capacidad defensiva del perímetro al igual que Klay Thompson, Andre Iguodala o Patrick McCaw, que destacan por ser especialmente perspicaces en el apartado defensivo de esas posiciones. Los Warriors se han hecho en su poder con un ala moderno de esta nueva NBA que les servirá para seguir creciendo en busca de un tercer anillo consecutivo.

Jacob Evans lideró en la Universidad de Cincinnati tanto en puntos como en asistencias con 13 y 3,1 por partido respectivamente. Su equipo consumó un balance total en el año de 31 victorias y cinco derrotas y acabaron siendo batidos en segunda ronda del March Madness ante Nevada por 75-73. Evans era la principal estrella del equipo aunque nunca llevó bien ese papel. No tendrá ese problema aquí, ya que el foco no caerá sobre sus hombros. Con jugadores como Kevin Durant, Stephen Curry, Draymond Green o Klay Thompson o incluso novatos que han llamado la atención más que él como Jordan Bell, podrá disfrutar de su juego sin pensar en las consecuencias que pueden tener sus malas rachas o malos partidos.

En cuanto a su juego ofensivo, destaca principalmente por su buen tiro de tres. Consiguió un porcentaje de 39,4% de acierto desde más allá del arco (129 de 327) en sus últimas dos temporadas en el baloncesto universitario. Su mecánica de tiro es poco convencional, aunque con la ayuda de los entrenadores y sus compañeros, se prevé que sobrepase esos problemas con facilidad. Tuvo dos entrenamientos privados con los Warriors antes de ser drafteado, uno el 12 de junio y otra el pasado miércoles. Draymond Green estuvo presente en sus entrenamientos y tuvo parte de la responsabilidad de su elección; un chico al que no le importa jugarse el físico en cada jugada defensiva en la que esté involucrado, justo como a Green le gusta.

Se preveía que los Warriors optaran por un ala en este Draft, la gran pregunta era si buscarían un ‘prospect’ de carácter ofensivo o defensivo. En suma, optaron por la versatilidad de un Evans cuya mentalidad ganadora encaja a la perfección en la filosofía de esta franquicia en los últimos años. Nos encontramos ante uno de esos componentes que es totalmente válido para un partido de Playoffs, justo lo que estaban buscando. Golden State no quería un jugador habilidoso para que ayudase a sumar más victorias en temporada regular, sino a un hombre que fuese capaz de ponerse el mono de trabajo cuando los partidos cuentan realmente. Bob Myers y Larry Harris pudieron hacerse con el diamante en bruto que deseaban desde que se dispusieron a realizar una lista con sus preferencias de cara al Draft. El número uno en esa pizarra que acabará vistiendo la camiseta de los Warriors y quién sabe si sumará su primer anillo el próximo mes de junio.