ANÁLISIS EUROLIGA: Sergio Rodríguez brilla en el CSKA

El Chacho ya es un ídolo en Moscú

Sergio Rodriguez brilla en el CSKA. Fuente: Marca.com

¿Por qué el Chacho se va al CSKA y no vuelve al Real Madrid? ¿Por qué Sergio Rodríguez nos traiciona así?  No sé si aún lo recuerdan, pero esto era Twitter un día 15 de julio de 2017, día en el que David Pick confirmaba la bomba que estallaría en una red social que no es conocida precisamente por desaprovechar situaciones de polémica y controversia cómo esta. Desde luego, éstas reacciones son algo que yo nunca podré olvidar. Podré medianamente entender, pero no podré olvidar.

Los más resentidos dirán que no volvió porque es un pesetero, los menos afectados por los colores dirán que fue porque el Real Madrid no quiso o no pudo ofrecer todo lo que ofreció el CSKA y, en segunda instancia, el Fenerbahce…  Y nunca se sabrá al 100%, pues en este tipo de casos, los equipos tienden al pick&roll (callar y continuar). O si no, que se lo pregunten a Ante Tomic. Yo no seré el que entre a valorar si su decisión fue legítima o no, y tampoco negaré que me habría gustado que se volviera a la capital, pero esa es otra historia que, con un poco más de tiempo, les contaré más adelante.

Tal día cómo un 15 de julio, Sergio Rodríguez decidía que la aventura de demostrar que es un jugador completamente válido para un equipo de la NBA, espinita que guardaba clavada desde 2010, había llegado a su fin en una ciudad que le dio todo ese amor fraterno que merecía. Después de un año evolucionando en la mejor liga del mundo, la hora de volver a Europa había llegado. Y, a disgusto de mucha gente, había llegado en Rusia.

Y lo cierto que, tras unos cuantos meses, el base ha encontrado cierta regularidad en el equipo y ha implantado su estilo, su «chachosistema», en un equipo que lo necesitaba tras la marcha de su gran estrella e ídolo de la afición, Milos Teodosic. Sergio Rodriguez ya es una realidad en Moscú. Tanto, que en el CSKA ya han jugueteado con la idea de olvidar un poquito a Milos Teodosic.

Eso sí, sólo un poquito.

Teodosic vs Chachismo: igual de efectivos

Una de las incógnitas más grandes en torno a la adaptación de Sergio Rodríguez al sistema ruso fue, inevitablemente, esa comparación con el estilo de juego de Milos Teodosic, al ser su relevo natural en el equipo y el jugador encargado de ocupar su plaza en el quinteto como base titular. Y la verdad es que es cierto, son dos bases muy talentosos, pero son prototipos muy diferentes de jugador a la hora de llevar la batuta del equipo.

Teodosic es un base capaz de dar cualquier pase, desde cualquier lugar de la pista, con cualquier parte del cuerpo y tener absolutamente la misma efectividad que un colegial cuando ejecuta un pase de pecho contra la pared del polideportivo. Y es por eso que la sombra de Milos es tan grande, tanto en Rusia cómo en cualquier zona de este mundo en la que mínimamente se aprecie el baloncesto. De aquellos jugadores que sólo conjugan el verbo ejecutar, y ejecutar, y ejecutar…

Sin embargo, el Chachismo se basa en la creación de espacios como forma de acribillar al rival. Desde el lugar de la cancha que sea y de la manera de la que sea, pero crear espacios tanto para él cómo para sus compañeros es el objetivo y la base del «chachosistema». Desde ese bote de balón tan endiablado que tiene y ese juego de pies en penetración del que se nutren tanto él cómo Nando de Colo y compañía, haciendo que el juego de equipo ruso brille cuando él está en pista.

Y no sé quién fue el que dijo que había que comparar. Es obvio que Teodosic es una auténtica institución en el CSKA y que el canario nunca podrá ni igualar lo que el serbio ha construido en la ciudad rusa (al igual que Milos tampoco podría hacerlo en Madrid), pero lo que es una realidad es que el chachismo se ha instaurado ya en el Palacio de Hielo. Los dos estilos funcionan bastante bien y los dos estilos mantienen arriba al equipo.

El Chacho, anotador cómo antaño

Tras un periplo NBA en el que tanto su selección de tiro cómo su eficiencia anotadora se vieron severamente cuestionadas (y con razón, defensas más físicas, la ya mencionada selección de tiro…), había dudas a principio de temporada sobre si Sergio Rodríguez iba a poder mantener o acercarse a los 16 puntos por partido que Milos Teodosic promediaba en el conjunto ruso. Además, en su pasado Euroliga, tampoco habíamos visto a un Chacho Rodríguez superando los 12 puntos en muchas temporadas… Salvo la del MVP en 2014.

Pero este año ha recuperado la mejor versión, la del MVP. Ese juego de espacios que tanto le funciona y del que tanto se está beneficiando le está permitiendo alcanzar los 14 puntos por partido (bueno, 13,5), misma marca que promedió el año que fue MVP de la Euroliga, la temporada 2013-14. Además, promedia un 49,8 % en tiros de campo y un 44,5 % en tiros de tres, la cual es la mejor marca de su carrera.

Sergio, a parte, se gusta. Está en un nivel de confianza tan alto que, si te poner a ver highlights de anotación del canario, te das cuenta de que todo son canastas difíciles, triples la mayoría punteados y tiros que decide tomar sin pensar ni un sólo minuto… No tiene miedo de liderar al equipo y, sobre todo, confía en él.

¿Y en qué se basa el «chachismo» este año?

El chachismo, señoras y señores, es esa canción de heavy metal de tempo rápido de guitarra y baterías. A veces, además, es un sólo de guitarra que se clava en tus oídos como esos triples de pecho, mecánica que tiene desde que era un colegial. Pero, otras veces, también es ese solo de batería con su bote en dos tiempos, parada y pick&roll. Eso sí, siempre manteniendo ese ritmo atrevido de una canción de rock&roll. Porque los viejos rockeros nunca mueren, por mucho que se vayan a jugar a Philadelphia con Joeles Embiids y Daríos Sarics.

Teniendo en cuenta los dos apartados anteriores, su nivel anotador y su manera de jugar desde siempre, tenemos que hablar acerca de cómo se acopla a su equipo, a los jugadores de su alrededor y cómo hace al equipo capaz de tener el juego tan fluido que tiene.

Su compenetración con Nando de Colo: Para entender el eje del ataque del equipo ruso, primero hay que entender de que manera Sergio Rodríguez y Nando de Colo comparten pista y se ayudan entre sí. Al fin y al cabo, son los dos mejores jugadores del equipo. Ninguno se copa espacio del otro, los dos generan desde distintos roles; De Colo lo hace sin balón y Sergio lo hace desde el bote. Y gracias al ritmo alto de juego, Sergio además tampoco amasa la bola, lo cual es bueno para Nando en el juego exterior; el juego sigue siendo alto y el francés sigue recibiendo los balones que necesita.

Los pívots, buenas continuaciones: Ya sea en contraataque o desde el bloqueo y continuación, los que más se benefician del juego de Sergio son los pívots del equipo; Othello Hunter y Kyle Hines. Gracias a que son dos jugadores con capacidades físicas para ello, arrollan por el carril central y son los principales beneficiados de los pases del base canario. Y es que, cuando todo falla, estos dos jugadores son apuesta segura y de confianza para conseguir canastas fáciles debajo del aro.

El ritmo de juego: Una de las cosas que el CSKA de Moscú hace muy bien este año es correr. Y Sergio Rodríguez es alguien que potencia eso. Rodeado de gente con capacidades atléticas muy por encima de la media, Sergio se encuentra en uno de los sistemas de juego que más le han beneficiado siempre, con posesiones muy cortas y un ritmo de juego muy alto, al se Sergio un base de corte alocado, como la canción de heavy metal.

El CSKA, al alza

El CSKA, líder de la Euroliga. Fuente: Gigantes.com

Si el objetivo en Moscú era continuar con estos años gloriosos que vive desde hace ya un tiempo, desde luego fichar a Sergio fue una gran decisión. Sergio se amolda cómo anillo al dedo en el núcleo del equipo (De Colo, Hines…) y ésto se transforma en victorias.

No hay nada más que mirar la clasificación para darse cuenta de que el CSKA de Moscú es uno de los equipos con más posibilidades de llevarse la Euroliga este año. No hay nada más que ver que son primeros de la fase regular con un récord de 24-6. Hasta ahora, el conjunto de Sergio Rodríguez se ha mostrado como el más sólido de la competición europea y ha salvaguardado una ventaja de 3 partidos respecto al segundo clasificado, el Fenerbahce, otro equipo muy poderoso y que ya se llevó esta competición el año pasado.

Y para la afición del Madrid… Para la afición madridista puede ser doloroso ver cómo uno de los suyos está ahora en un gran estado de forma y contribuyendo a que su equipo, rival directo, domine la Euroliga. No debe ser un plato de buen gusto tampoco ver que ese jugador es Sergio Rodríguez, que ha sido tan importante en la entidad blanca y que tantas alegrías ha dado en el Palacio de los Deportes. Quizás es el precio que hay que pagar por Facu Campazzo. Quizás es el precio que hay que pagar por Luka Doncic. Quizás es el precio que hay que pagar por Sergio Llull… Quizás no se puede tener todo.