Valencia Basket complica el camino del Real Madrid en Euroliga

Valencia Basket 96-88 Real Madrid

Erick Green intenta mover el balón. Fuente: Carlos Calvillo (SB)

La Fonteta es un lugar nada plácido para el Real Madrid, un sitio que cada vez se vuelve más hostil para los blancos en sus duelos. Y no por el ambiente, aunque tiene parte de culpa, sino porque los encuentros fáciles, cómodos o sin barreras, han demostrado no darse. Este martes, los de Pablo Laso han confirmado estas sensaciones al perder, 96-88, ante Valencia Basket, que les complica su camino hacia ser uno de los cabeza de serie del Top 8 de la Euroliga.

El encuentro comenzó ya a dar pistas de lo que iba a ser desde un inicio, con un Dubljevic enchufando un triple para inaugurar el marcador. El montenegrino volvió a parecerse al jugador que fue MVP de la pasada liga conquistada por el equipo taronja, y que fue una de las piezas importantes en la victoria consiguiendo 17 puntos, 7 rebotes, 2 asistencias para un 18 de valoración. Y eso se notó en el juego de los valencianos, al tener la pintura bien cubierta gracias también a la aportación de Tibor Pleiss, con 14 puntos y 3 rebotes.

Frente a la potencia interior de Valencia Basket, un Real Madrid de exteriores, ya que hombres grandes como Walter Tavares o Felipe Reyes no tuvieron su noche en la Fonteta. Entre Gustavo Ayón y ellos tan solo 5 puntos, una cifra muy pequeña en comparación a los 31 de la pareja Dubljevic-Pleiss. Pero Facundo Campazzo, guía de juego de los de Pablo Laso, tomó las riendas ante la ausencia de Luka Doncic, y fue de los mejores con 17 puntos, además de que ayudó a mantener vivo a su equipo.

La aportación del argentino junto a la de otros jugadores como Taylor o Thompkins hicieron que Real Madrid no perdiera el ritmo del partido. Pero el peso de la efectividad y el buen juego de Valencia Basket acabó decantando la balanza, sin importar algunas acciones arbitrales que fueron discutidas por ambos lados, y que siempre protagonizan los duelos entre blancos y taronjas, aunque esta vez no del todo.

Al final, una derrota que significa tener el billete de playoffs asegurado para Real Madrid pero no la cuarta posición, que da para ser cabeza de serie en la siguiente ronda de Euroliga. De nuevo, la Fonteta se interpone en el camino, que no lo cierra, sino llena de piedras. Los blancos se quedan así con dos victorias menos que Olympiacos, tercero, y las mismas, 16, que Zalgiris Kaunas y Panathinaikos, sus perseguidores más inmediatos.

Victoria para subir la moral

Sam Van Rossom y Bojan Dubljevic mostrando complicidad en la presentación inicial del equipo. Fuente: Carlos Calvillo (SB)

Por su parte, Valencia Basket consigue una victoria, la décima en Euroliga, que de poco sirve a nivel de competición europea, pero que bien le viene para recuperar cierta confianza de cara al futuro en Liga Endesa, donde se juega sus opciones para disputar la máxima competición europea en la temporada que viene.

Con gran parte de la plantilla a su disposición, excepto San Emeterio, Williams y Diot, Txus Vidorreta pudo ver como la gran parte de los que tuvieron minutos aportaron puntos y ritmo para una gran victoria ante un rival directo en Liga Endesa y de calidad. No solo la nombrada superioridad interior, que fue una de las claves de ganar, sino que, en el exterior, las cosas fueron bastante bien.

Los valencianos afrontan estos últimos partidos Euroliga para recuperar sensaciones. Sam Van Rossom, en su segundo partido tras volver de la lesión en las vértebras, aportó 10 puntos y una sólida dirección de juego. Rafa Martínez y su idilio con el tiro exterior, que mantienen una fuerte regularidad para el capitán, y el ver que Joan Sastre está recuperando el ritmo de como jugaba la temporada pasada. Todo esto, además de un encuentro aceptable de Thomas, Abalde o Green, y un récord: al menos diez jugadores han anotado un triple en el partido, un récord para Valencia Basket y para la Euroliga. No disputaran el Top 8, pero el futuro no es gris para los taronja.