Joe Johnson, otra opción para los Warriors
En la Bahía buscan reforzar su banquillo
Golden State Warriors decidió no moverse en el ‘deadline’ tras haber estado negociando la posibilidad de añadir nuevos jugadores a su plantilla. Los malos resultados recientes que han despertado cierta preocupación entre una afición que no está acostumbrada a perder en estos últimos años, han llevado a que la organización se plantee la incorporación de nuevas piezas. Los números están ahí, los malos porcentajes en el tiro y la falta de una alternativa ofensiva desde la segunda unidad han hecho que se lleven a cabo estas iniciativas. Derrotas tan preocupantes como la sufrida frente a Oklahoma City Thunder han motivado a que los directivos de los Warriors estuvieran con los ojos bien puestos en el mercado, aunque finalmente decidieron tomar una de las decisiones más inteligentes posibles. En lugar de dejar marchar piezas importantes para el futuro como rondas del Draft o el sophomore Patrick McCaw, han preferido esperar.
Llegaron a la conclusión de que lo más efectivo sería esperar a que los equipos fueran liberando a jugadores que se convertirían en agentes libres para dejar hueco a otros nuevos. Ya se sabe cómo funciona el último día de traspasos en la NBA. Cleveland Cavaliers ha sido un gran ejemplo de ello. Al no estar contentos con los resultados del equipo, han decidido dejar marchar a un total de siete jugadores que no vestirán más la camiseta de Cleveland, entre ellos pesos pesados de la competición como Isaiah Thomas, Derrick Rose, Dwyane Wade o Jae Crowder. A sabiendas de que cosas así sucederían, decidieron tomárselo con calma y explorar el mercado de agentes libres, que estaría muy poblado tras esa fecha crítica. Uno de los jugadores que más ha despertado la atención de los Warriors estuvo involucrado en uno de los traspasos de Cleveland Cavaliers. En el movimiento que mandó a George Hill y Rodney Hood a Cleveland, Joe Johnson era mandado directamente a Sacramento Kings, franquicia que ha decidido rescindir su contrato.
De esta manera se ha abierto una opción muy interesante para Golden State en el mercado. Se han dado contra los morros con una opción que puede completar las necesidades que buscan en su segunda unidad, anotación. Joe Johnson, que tiene actualmente 36 años y ha sido siete veces All-Star, podría proporcionar exactamente eso al banquillo de los Warriors. Tras ser cortado por Sacramento, ha expresado su deseo de unirse a un equipo que tenga opciones a pelear por el anillo, ¿y qué franquicia tiene mayores posibilidades de alzar el Larry O’Brien? Sí, lo has acertado. Todas las piezas parecen encajar, aunque hay otros equipos interesados como Boston Celtics y Houston Rockets que podrían poner sobre la mesa ofertas muy interesantes para el veterano alero. Andre Iguodala, Nick Young, Omri Casspi y Patrick McCaw han tropezado con la misma piedra durante la presente temporada. El tiro de tres puntos se les ha atragantado demasiado y no ha sido nada bueno para ellos.
Johnson promedia 16,2 puntos por partido en toda su carrera. Es cierto que sus porcentajes han ido bajando poco a poco cada temporada, y en este curso se sitúa en 7,3 puntos por noche habiendo jugado 32 partidos con Utah Jazz. Está anotando únicamente un 27,4% de sus triples, una estadística que asusta bastante en Golden State. De todos modos, Joe Johnson es un jugador experimentado y bien conocido por su facilidad anotadora. La pasada temporada sorprendió a muchos promediando 15,7 puntos por partido en la travesía de Utah por la postemporada, en la que acabaron derrotados en semifinales de Conferencia a manos de Golden State Warriors. Es un arma que les puede servir de gran ayuda en su lucha por levantar su segundo título consecutivo y se presenta como una de las opciones más interesantes en este mercado de agentes libres. Los Warriors no deben tener muchas dudas y presentar su oferta. Para que esto pueda suceder, sería necesario eliminar a otro jugador de la plantilla, y ese sería JaVale McGee.
Con la aparición estelar de Jordan Bell, McGee se ha quedado en un segundo plano a pesar de haber ganado más protagonismo en los últimos días raíz de la lesión que sufrió Bell en Chicago y que le ha hecho perderse las dos últimas semanas. En el caso de que los Warriors decidiera mantener a todos sus pívots y no retocar la rotación, el sacrificado sería Omri Casspi. Sus problemas recientes con las lesiones y sus todavía preocupantes molestias de espalda que le han hecho perderse gran parte de la temporada, podrían motivar a los Warriors a llevar a cabo este movimiento. El israelí llegó a la Bahía el pasado verano por el mínimo de veterano, un montante total de 2 millones de dólares. Su rendimiento no ha sido como se esperaba cuando lo contrataron. Sólo ha anotado nueve triples en todo lo que llevamos de temporada y esto preocupa especialmente a los dirigentes de la entidad.
También existen otras opciones como Marco Belinelli, que ha rescindido su contrato con Atlanta Hawks y se convertirá en agente libre en las próximas horas. Su nombre había sonado con fuerza durante la pasada semana, y una posible vuelta a la franquicia que le dio la oportunidad de jugar en la NBA, sería el final feliz a un cuento idílico. Marco Belinelli busca su segundo anillo en la competición tras coronarse en San Antonio Spurs en 2014, un año cuyos porcentajes de acierto en triples llegaron hasta un 43%. En esta última temporada en Atlanta, parece haber recuperado su mejor forma y los Warriors podrían interesarse también en su incorporación. Solo el tiempo dirá quiénes serán los elegidos para reforzar el banquillo de Golden State.