Un intratable Luka Doncic destruye el sueño letón.

En uno de los mejores partidos de la historia de la Eurobasket, Luka Doncic fue el héroe en el espectacular triunfo de la selección eslovena ante su similar letón.

El partido empezó igualado los primeros 4 minutos hasta que Goran Dragic despertó todo su talento. Cada acción, cada movimiento, cada incursión, cada tiro era una poesía en movimiento. Contagiando a su equipo, con un Anthony Randolph impactante y muy preciso. Con una precisión de escándalo que bordo el 80% de TC, mientras que los letones se encontraban perplejos, siendo presas fáciles de la presión de la defensa eslovena, logrando acertar solamente un 23% TC.

Los letones empezaron el juego con la sangre en el ojo. Además demostraron que no iban a ser presas fáciles, despertando su linaje guerrero. Luchando cada pelota, liderados por un Kristap Porzingis inconmensurable. Bien acompañado del esfuerzo y el poder de los hermanos Bertans, demostrando amor a la camiseta. La defensa letona absorbió a Goran Dragic y a un Luka Doncic muy desacertado en el triple. Cada intento esloveno fue vapuleado por un juego muy físico, siendo testigos del embate letón, cerrando la primera mitad con un 55 a 51.

Después de una desatroza primera mitad Luka Doncic, la perla europea, nos confirmó las sensaciones del partido anterior y se mostró como una amenaza. Llevando por momentos la responsabilidad del encuentro en base a una presencia aterradora. Por lo tanto, su actuación le dio oxigeno a Goran Dragic. De tal modo que lo hizo despertar de su letargo, atacando el aro contrario con seguridad. Fruto de esto fuimos testigos de un Kristap Porzingis completamente desaparecido. Llagando al último periodo 76 a 66 a favor de los eslovenos.

Durante esta euro hemos visto grandes partidos, grandes cuartos. Sin embargo, este último parcial nos llevo a lo inimaginable. Cada minuto fue una como una pelea de box entre dos titanes, dejando la piel en la cancha. El unicornio se transformó en un potro salvaje, terminando el partido con 34 puntos. Mientras los hermanos Bertans, demostraron al mundo que para ganarles tenían que sufrir.

Fueron en esos momento que vivimos la mejor actuación de Goran Dragic y Luka Doncic, quienes nos emocionaron con toda su magia. Además, hay que destacar la sangre fría de la perla europea, quien en los últimos segundos con el marcador apretado, estuvo en la línea de tiro libre y, a su 18 años, mostró el coraje de las grandes estrellas, cerrando el partido.

Existen encuentro que no merecen terminar porque la emoción que nos envuelve, se transforman en una adicción que no tiene cuando acabar…

• Eslovenia: Luka Doncic (27 puntos, 9 rebotes), Goran Dragic ( 26 puntos 8 asistencias), Anthony Randolph (16 puntos, 9 rebotes)
• Letonia: Kristaps Porzingas (34 puntos, 9 rebotes), Davis Bertans (23 puntos, 3 asistencias), Dairis Bertans (12 puntos, 6 asistencias)