La NBA estaría considerando una reforma en la lotería del draft. Recordemos que esta lotería permite a los peores equipos de la liga (aquellos no clasificados a playoffs) poder acceder a los mejores prospectos jóvenes de la camada que ingresa a la NBA.
Philadelphia. Año 2013. Sam Hinkie es contratado por los 76ers como su nuevo Gerente General. Su primer movimiento importante fue traspasar a su base titular, y All Star, Jrue Holiday a los New Orleans Pelicans a cambio de su elección de primera ronda. A partir de aquí comenzaría lo que se ha llegado a llamar The Process. ¿En qué consistió? Lisa y llanamente, en perder. En ser terribles. En intentar ser los peores equipos de la liga.
A este acto de perder «a propósito», para llegar al draft con grandes chances de hacerse con los servicios de una futura estrella, se le llama tanking. Y los Sixers se hicieron especialistas en ello. A la temporada siguiente, siguieron con su estrategia de perder. La siguiente, lo mismo. La otra, que fue esta última que pasó, un poco menos pero también perdieron.
Pero mal no les fue. Con este procedimiento lograron obtener su núcleo joven. Joel Embiid (que se apodó a sí mismo The Process), Dario Saric, Ben Simmons, Markelle Fultz. Todos llegaron a Philly a través del draft, y finalmente están listos para en esta temporada buscar un lugar en los Playoffs de la accesible Conferencia Este.
Adam Silver, comisionado de la NBA, no quiere otro The Process. Es por esto que está considerando seriamente cambiar la forma en que los equipos acceden a las primeras elecciones del draft.
Hoy en día, el equipo más perdedor de la Liga es el que mayor oportunidad tiene de hacerse con el número 1 en el draft del año siguiente (25% de posibilidades). Además, no tiene posibilidades de que su elección caiga más allá de la cuarta posición. Siempre hay que tener en cuenta posibles sorpresas, pero todos los GMs saben que si son el peor equipo de la liga tienen muchas posibilidades de hacerse con su estrella del futuro.
Una cosa más a tener en cuenta: Los Angeles, Miami, Boston, New York, por nombrar algunos, siempre van a ser destinos apetecibles para superestrellas en la agencia libre. Pero pensemos en mercados más chicos. Denver, Milwaukee, Phoenix, entre otras, son franquicias que su mejor (casi única) oportunidad de construir es a través del draft.
La reforma que maneja la liga tiene que ver con cambios en la lotería, y tiene pensado discutirla con el comité encargado esta misma semana. Simple: Emparejar las posibilidades de los peores equipos para de esa manera lograr que el tanking deje de ser un incentivo.
Los tres peores registros de la temporada tendrían iguales probabilidades de obtener la primera selección, exactamente el 14%. Y el resto de los integrantes de la lotería bajarían sus porcentajes entre un 1 y un 2%. La idea es que todos tengan porcentajes más parejos. También se estudia la posibilidad de que el peor récord pueda caer hasta la quinta posición, el segundo peor hasta la sexta, y así sucesivamente.
Por último, decir que para que esta reforma tenga lugar se debe aprobar por el voto de 23 de los 30 equipos que componen la NBA. La idea del Comisionado Silver es que empiece a regir a partir de 2019. Habrá que ver que deciden las franquicias, sobre todo las que ya tenían en sus planes una reconstrucción y que contaban con perder la mayor cantidad de partidos durante algunas temporadas para hacerse con su próxima joya de la corona.
