Jarrett Allen: «Estoy deseando jugar en los Nets»

Con 19 años será el jugador más joven de Brooklyn Nets

Jarrett Allen. Victor Arrufat (SB)

La pasada noche del Draft los Brooklyn Nets, tenían claro que su objetivo era hacerse con un jugador interior. Pesé a que los primeros objetivos de la franquicia fueran marchándose a otros equipos, la franquicia neoyorquina, consiguió hacerse con el talento de Jarrett Allen.

Tras ser elegido en el Draft, Allen dió una rudea de prensa:

Estoy deseando jugar en los Nets. Con un grupo de jugadores jóvenes, creo que habrá una buena química. No hay veteranos, así que todos perseguimos el objetivo de hacernos un hueco en la liga.

La envergadura del pívot llega a los 2,26 metros, su salto puede alcanzar 90,17 centímetros y su capacidad de alcance ronda los 24,13 centímetros. Tomando como referencia estas características, el propio jugador habló de lo que podía aportar al equipo:

Sobretodo puedo ayudar defensivamente. Puedo cooperar taponando tiros, defendiendo en los pick-and-rolls y en definitiva hacer cosas por el estilo. Y en cuanto al juego ofensivo, puedo contribuir con mi pequeño conjunto de habilidades básicas, en las que tengo que mejorar el posteo y el fadeaway.

Según Jonathan Givony, el prestigioso periodista de ‘Draft Express’, Allen habría empezado con mal pie su temporada en Texas para finalmente conseguir reivindicar su nombre tras ser seleccionado para el ‘Big 12’s All-Rookie’ y para el ‘All-Conference Third Team’, todo esto gracias a una actuación estelar durante el mes de febrero en el que promedió 18 puntos, 8,5 rebotes y 1,3 tapones en un total de 35 minutos en ocho partidos.

Su promedio total para los Longhorns fue de 13,4 puntos, 8,4 rebotes y 1,6 tapones. Allen es un pívot ‘old school’ de poste bajo que ejecuta pocos tiros exteriores. Como dato, cabe decir, que no convirtió ningún triple en su año de freshman.

En abril, ‘Draft Express’ posicionaba a Allen en el octavo pick, pero este fue descendiendo progresivamente hasta que el jueves se asentó en la decimosexta posición y es que el juego físico es su mayor hándicap. El propio jugador ha tomado conciencia de ello y asegura ponerse manos a la obra.

Tengo que ganar músculo si quiero jugar como pívot en la NBA.

Finalmente, Allen respondió a una serie de preguntas, entre ellas que qué le parecía el traspaso de Brook Lopez a lo que contestó con una gran sonrisa en la cara y dijo:

Supone una gran oportunidad para demostrar mis dotes.

Las declaraciones de un recién llegado Jarrett Allen, que puede tener en sus manos el futuro de la franquicia de Brooklyn, que, tras muchos años en la sombra, empieza a construir un `proyecto interesante cimentado en una base de jugadores jóvenes.