La intensidad y el rebote del Baskonia condenan al Valencia Basket

Baskonia 90-70 Valencia Basket

Shane Larkin lanza a canasta: Foto Baskonia.com

Segundo Round en el feudo Baskonista que cae para el lado Vitoriano 90-70. El Valencia Basket hipotecó su partido ya desde los primeros instantes debajo de los tableros, donde el Baskonia generó un agujero negro que absorbía todos los balones. La intensidad final hizo caer el encuentro del lado de los Sito Alonso con un fantástico último cuarto 24-13. Al final toda la eliminatoria por decidir con el 1-1, eso sí más favorable para los naranjas que tendrán factor cancha en la Fonteta, donde intentarán cerrar la eliminatoria y clasificarse para la final de la Liga Endesa.

Nada más comenzar el choque se veía que el Baskonia estaba dispuesto a morder y sobre todo aplicarse en defensa y rebote. Por su parte el Valencia Basket sin nada que perder, intentó que en ningún momento se le escapara el partido, para llegar a la recta final con opciones de llevarse el encuentro como en el primer choque. Este juego farragoso y de lucha era el que le interesaba a los Valencianos, que pese a regalar totalmente el rebote a los Baskonitas, no sufrían demasiado para anotar, con un espectacular Diot, que perforaba continuamente el aro desde la línea de 6,75. En el segundo periodo vimos mucha intensidad, apareciendo en el factor cancha, donde el público del Buesa Arena, empujaba a los suyos y protestaba cualquier decisión polémica, con el resquemor de la última jugada del martes. Por parte del Baskonia, Ricky Ledo empujaba a los suyos para llegar al descanso con ventaja para los locales 46-41 en un partido cargado de emoción.

El rodillo del Baskonia

El banquillo del Valencia Basket hacía un buen trabajo mientras que el Baskonia, se encargaba de sumar con puntos en segundas oportunidades siempre que podía, ya que los valencianos no terminaban de gestionar el rebote. Dubljevic desaparecido en el encuentro, era un gran handicap para los de Pedro Martínez, mientras que Shane Larkin, estrella local, despertaba en la segunda mitad sobre todo a la hora de asistir y robar balones.

El Valencia Basket seguía a remolque acusando el rebote continuamente, mientras que por parte de los locales, el siempre regular Adam Hanga, se encargaba de defender a un nivel all star. Los tiros libres mantenían vivos a los Taronja, pero no era suficiente para la intensidad defensiva que ponía en pista el Baskonia. Durante el último cuarto, la ventaja oscilaba sobre los 12 puntos, esa ventaja incómoda, que no da tranquilidad a los entrenadores, y que permitía al Valencia Basket mantener sus opciones. Pero en los últimos 4 minutos el Baskonia sacó un rodillo que aplastó a los de Pedro Martínez, que nada pudieron hacer ante la intensidad en ambos lados de la cancha del equipo vitoriano, que se llevó el partido sin discusión