Algunos ajustes necesarios de los Utah Jazz

necesitan cambios para mejorar

Utah Jazz
Quin Snyder está haciendo un gran trabajo. Nil Alemany (SB)

29 equipos de la liga llevan haciéndose la misma pregunta toda la temporada. ¿Cómo se para a los Golden State Warriors? ¿Cómo paramos a Curry, Durant, Thompson y Green? Tal vez no se pueda pararlos, sino contenerlos. Forzarles a cometer pérdidas o bien fallar tiros. Utah Jazz ha perdido 4-0 abajo en la serie. Tal vez algo esperado. A lo mejor podríamos haber arrancado alguna victoria al equipo de la Bahía. ¿Cómo?

  1. Nos sigue faltando un base. George Hill es muy irregular y Curry se lo ha comido con patatas. Nuestro actual base viene de 3 temporadas jugando menos de 60 partidos de media. Esta temporada ha jugado 49 partidos. En el año pasado 74 partidos, y 43 en la temporada 2014/2015. Como siempre, las malditas lesiones. Quiero recordar que George empezó el curso como un tiro. Dirigiendo al equipo, anotando y asistiendo. Si Hill mantuviese el nivel de principio de temporada podría entenderse que pidiera el máximo. Ahora bien, viendo las lesiones que ha tenido y su irregularidad, no creo que se merezca semejante contrato. En la edad de los grandes bases, Utah Jazz necesita a un gran base. Además, Shelvin Mack es un buen base suplente pero no tiene el nivel necesario. Y qué decir de Neto, que ni está ni se le espera.
  2. Seguir creciendo como equipo. Hay que creérselo, no salir a jugar apáticos. Como hemos comentado en otros artículos de análisis u opinión, estamos muy contentos con el desarrollo del equipo esta temporada. Por desgracia, siempre quedan detalles para completar la plantilla y optar al anillo. Somos un gran equipo, pero no somos un súperequipo. ¿Una solución? Rezar para que ocurra un milagro y traspasar a alguien por un pick alto. Dado la camada impresionante que viene este Draft, no digo de coger un Fultz o un Ball. Pero si poder cambiar algún jugador por un pick 15 o 20 que cumpla con expectativas. Un jugador que cumpla con lo establecido y sea regular. Que no se repita lo de Exum o Favors. 
  3. Por el estilo de juego de Utah implantado por Snyder, posesiones largas, ralentización del juego y defensa férrea, los Warriors y los Rockets nos vienen fatal con su juego de ‘Hit and Run’. Rápidos contraataques y lluvia de triples. Es decir, ya de entrada, por propio sistema los Jazz parten con desventaja. Con equipos con un ritmo normal, los Utah Jazz siempre consiguen imponer su estilo en el juego. Cosa que se traduce en victorias, incluso contra Cleveland. Si los Jazz consiguen dejar a los Warriors en menos de 100 puntos, el equipo de la Bahía tendrá muy difícil ganar. Una solución sería no cometer pérdidas que tanto nos han castigado esta serie. Agotar el reloj al máximo y nunca perder la posición en el campo. El equipo de la Bahía tiene un ataque espectacular, pero su éxito ha sido la defensa. NO se comenta en noticias ni en artículos, pero los Warriors han conseguido formar un bloque defensivo encabezado por Draymond Green muy sólido. En la serie consiguieron cerrar el ataque de Utah Jazz y cerrar bien a Hayward. Faltó imponer el estilo del equipo y tomar mejores decisiones en ataque.
  4. Nuestro banquillo ha cumplido durante toda la temporada. Deberíamos aprovecharlo más con rotaciones y reparto de minutos. A pesar del cansancio anterior de la serie, toca bajar el culo y defender. Mucha mayor intensidad. Ya que ralentizar el juego no funciona, aprovecharnos de su corta rotación. Ahogarlos a base de intensidad y una defensa asfixiante. No queda otra. Como ejemplo tenemos a los Celtics con Avery Bradley y Marcus Smart, y su defensa ante los Warriors.
  5. Rumores de traspaso. Kyle Lowry y Jimmy Butler han aparecido en los rumores de los Jazz  nada más acabar la serie. En el caso de Lowry, ha decidido salir a la agencia libre este verano. Todo apunta a que querría irse a un equipo del Oeste, fuera del malvado imperio de LeBron. Siendo honestos, a los Jazz les vendría como anillo al dedo. Otra cosa bien distinta es el dinero que va a pedir a la franquicia. Y sobre todo su edad, pues el base tiene ya 31 años. Con las renovaciones de Gobert y Hayward, tal vez sea necesario desprenderse de jugadores. Respecto a Jimmy Butler, los rumores son mucho más difíciles de creer. Chicago ha dicho numerosas veces que no lo quiere traspasar. Quedaría por ver qué ofrecerían los Jazz a los Bulls. Y viendo casos anteriores (Boston Celtics) Hoiberg pediría un ojo de la cara. Además, los Jazz ya cuentan con Gordon Hayward. ¿Lo pones a jugar de escolta? ¿De Ala-Pívot? 

De nuevo destaco que son los Warriors. Simplemente son jugadores que no puedes parar, salvo que tengas otro equipazo. Más que haber ganado la serie, pedimos cosas reales. El equipo mormón se mereció despedir la temporada con alguna victoria. 

Todos los Jazz son ahora plenamente conscientes de lo que están haciendo. En el futuro inmediato el plan es ascender a la cima de la Conferencia Oeste. Exactamente es lo que tienen para encararse a los Warriors: progresar.

Durante el próximo descanso de la temporada, que comienza ahora, tienen que mantener en primer lugar la base sobre la que se sustentan. Es decir, obtener la firma de Gordon Hayward. A partir de ahí, hay cambios y mejoras para hacer. Añadir y cortar jugadores. Y más allá, confiar en el crecimiento continuo de los jugadores que no han sido lo suficientemente bueno contra los Warriors.

Ellos saben lo lejos que han llegado, sin embargo, aún queda distancia por recorrer. A medida que abandonaron la pista el lunes por la noche, los aficionados les despidieron aplaudiendo, reconociendo los progresos realizados. Han aumentado su total de victorias de la temporada pasada en 11 victorias. Se han clasificado para los PlayOffs por primera vez en cinco años. Han ganado una serie de playoffs por primera vez en siete años. Y todo esto a pesar de la gran plaga de lesiones que nunca abandona a los Utah Jazz. Dos de sus jugadores se han convertido en All-Stars, o están en consideración para ser parte del primer equipo All-NBA. Y han sido barridos por el mejor equipo de baloncesto del mundo. 

Toda la afición, a pesar del resultado desequilibrado, entiende que aún queda mucho trabajo por hacer. Se ha hecho un gran trabajo esta temporada. Los jugadores entienden que deben responder. Deben ser mejores. Después de la decepción al terminar el partido, los jugadores recibieron su reconocimiento y el aplauso de los suyos. Mientras, la afición se despedía coreando: «Gordon Hayward, Gordon Hayward, Gordon Hayward».