Los Raptors volverán a citarse con LeBron y compañía

Toronto Raptors 92 - 89 Milwaukee Bucks

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Mark Runyon (CC)

Los Toronto Raptors consiguieron pasar a las semifinales de la Conferencia Este tras un precioso partido en el que derrotaron por 92-89 a unos correosos Milwaukee Bucks que lo dieron absolutamente durante los 6 partidos de una sorprendente primera ronda. Los Raptors repitieron esa fórmula de Lowry-DeRozan-Powell-Carroll-Ibaka que muy seguramente no se verá contra los Cavs de Love y Thompson. Por otra parte, los de Wisconsin lucharon con lo que tenían en un partido que significó una dosis de experiencia a los jovencísimos Bucks de Antetokounmpo, Middleton, Maker, Brogdon y ¿Parker?

El partido estuvo durante 3 cuartos bajo el mando de los canadienses que aprovecharon su experiencia para martillear una y otra vez a los locales. Se llegó hasta el +25 visistante con un 71-46 con 5:16 por jugar del Q3. Y, sin embargo, esto es la NBA. Esto son los PlayOffs. Y con un jugador como Giannis Antetokounmpo (huele a All-NBA) firmando 34-9-3-2-2 nunca puedes dar nada por hecho. Con un increíble parcial de 7-34, indigno de la eliminación de los Bucks y del pase de los Raptors, los de Milwaukee llegaron a remontar con un triple de Jason Terry poniendo un apretado 78-80. Faltaban 3 minutos y en Toronto se iban preparando para el Game 7.

Fue entonces cuando apareció, al fin, la figura del líder de Toronto. DeMar DeRozan, el segundo máximo anotador del Este, un escolta incansable y que, junto a Lowry, se desinfla a niveles subterrestres en los PlayOffs. Pero por fin destacó. Anotó 7 puntos en los últimos 3 minutos, los momentos «clutch». Junto a Patterson, Joseph y la defensa de Carroll e Ibaka pudieron colocar la diferencia en el 87-89. Sin embargo, los locales siguieron apretando y pusieron un partido 89-90 a falta de 3 segundos. DeRozan anotó los dos libres, con el 89-92 a la postre defintivo. Fue Tony Snell quien tuvo el partido en el bolsillo. Se equivocó al sacar y «win or go home».

Se espera un brillante futuro para estos Bucks. Ánimo Kidd, ánimo jóvenes, ánimo Giannis. Y suerte, mucha, para estos inestables Raptors que se enfrentarán a los abusadores del Este. A la dictadura del Rey LeBron.

La heroicidad de los Bucks frenada por los Raptors