David Nwaba, el nuevo fortín de los Angeles

Cuando los Angeles Lakers deciden fichar a David Nwaba, ya habían tirado la temporada 2016-2017. Iniciaban un periodo de prueba de cara a la temporada siguiente, jugadores que encajen con las necesidades y carencias del equipo, y el primero en ser probado fue el escolta procedente de la Universidad de Cal Poly. Firmó dos contratos de diez días en los que mostró su valía, y la franquicia en lugar de probar otros jugadores con contratos de corta duración, firmaron a Nwaba por dos años. Esto significa que ha sido capaz de cumplir con las expectativas del equipo y ven en él un efectivo fiable para salir en la rotación. Este artículo será un análisis en el que comprobaremos de donde procede hasta llegar a los Angeles Lakers y qué puede aportar de ahora en adelante.

Los Angeles es la ciudad natal de David Nwaba, un escolta de 1.93 metros, 95 kilos y 24 años. Su paso por el instituto lo realizó por el University HS, donde fue dos veces el mejor jugador de la Conferencia Oeste y elegido en el primer equipo de la liga. Pasa a la Universidad de Santa Mónica College, donde en su año de freshman promedia 20.5 puntos, 8.8 rebotes y 2.5 asistencias por partido. Al año siguiente, se une a la Universidad de Cal Poly, jugando con los Cal Poly Mustangs durante tres temporadas. En su primer año se desmarca como un jugador importante para su Universidad, acumulando diferentes premios menores en la Conferencia Oeste y la división perteneciente a California, promediando 11.7 puntos y 4.8 rebotes por partido, y en su segundo curso tiene promedios muy parecidos e importancia muy parecida en su equipo. De este modo, se inscribe en el Draft 2016, donde no es elegido por ningún equipo. Es fichado por los Reno Bighorns de la D-League, pero es transferido, y a partir de este momento, comienza a jugar para los Angeles D-Fenders, equipo asociado a los Lakers perteneciente a la NBA D-League.

Juega cuarenta partidos con ellos, en los cuales promedia 14.1 puntos, 6.9 rebotes, 1.1 asistencias y un PIE (estadística avanzada que indica el impacto global del jugador en pista) de 12.5. Junto a Vander Blue, lidera al equipo a ser uno de los mejores equipos de la liga de desarrollo, y así es como los Lakers se fijan en él y deciden probarlo. Finalmente debuta con el equipo de Luke Walton el 28 de febrero de 2017 ante los Charlotte Hornets.

Descrita ya su biografía, pasemos a ver los motivos por los que la franquicia y la directiva le hayan brindado un contrato de larga duración:

• Tiene la confianza tanto de Luke Walton como de la plantilla. La gran mayoría de las declaraciones tanto del staff técnico como de la plantilla son para enaltecer las cualidades defensivas e intangibles de Nwaba. Creen en él, en que juega duro tanto en ataque (aunque no aporte muchos puntos) como en defensa, y opinan que es una gran adición a lo que ya había en el equipo, que aporta cosas diferentes. Según Walton, entrena como el que más, y le da al equipo una mentalidad defensiva que es necesaria para competir contra grandes ataques.
• Realmente defiende bien. Utiliza perfectamente su cuerpo y sus piernas para defender atacantes más altos que él. Muy rápido en la movilidad lateral y gran salto, que le permite colocar tapones muy arriba. Atento en las ayudas y aguanta bien los cambios en los bloqueos con los hombres grandes. En datos, si jugase 36 minutos, sus estadísticas serían de 5.2 rebotes, 0.9 robos, 1 tapón y 1.2 rebotes ofensivos, buenos números para un defensor puro como él. Y más allá de números, su presencia defensiva se hace notar cuando está en pista, ya que aumenta el número de contraataques y pérdidas de balón del rival. Puede ser vital para cortar rachas anotadoras y parciales de los rivales, que tan frecuentemente sufren los Lakers. O incluso, parar al exterior que más daño esté haciendo.

• Tiene unos buenos muelles en los pies. Ya se le han visto jugadas espectaculares en forma de mates, tapones y alley-oops, y este tipo de acciones encienden a los compañeros, como se puede ver con Larry Nance Jr.
• Es un buen complemento para D´Angelo Russell, Jordan Clarkson o Brandon Ingram, ya que aporta intangibles de los que ellos carecen. Sobre todo, equilibra la balanza defensa-ataque, que suele estar muy descompensada normalmente, ya que los tres jóvenes son excelsos en ataque e insuficientes en el otro lado de la cancha. Además, si a él le sumas a Corey Brewer, se puede formar un buen núcleo defensivo contra los exteriores contrarios.

Estas son las razones principales del fichaje de Nwaba, sin embargo, es de destacar el gran problema o limitación que tiene, el ataque. Es un pésimo tirador desde todas posiciones excepto a la hora de penetrar. En lo que ha transcurrido de su temporada, solo ha intentado dos triples, y aunque haya anotado uno de los dos, es un dato que lleva a engaño. Tiene un porcentaje de tiros de campo del 56%, contando con que solo intenta bandejas y mates, por lo que no es un porcentaje espectacular en relación al tipo de tiros que se juega. Tiene un 62% de porcentaje en tiros libres, pobre para un jugador que debería vivir de ello tras sacar faltas de penetraciones. Y el dato revelador, anota 4.4 puntos por partido. Cierto es que no se le pide de esa faceta, pero debería mejorar porque al fin y al cabo, este juego va de meter más canastas que el otro, y en el ofensivo resta lo que puede sumar en lo defensivo.

Estos son los datos, ahora la cuestión de darle más minutos y darle un margen de mejora en estos dos años de contrato que ha firmado. En opinión de un servidor, no es un jugador que tuviera lugar alguno en una rotación que tuviera opciones de aspirar a algo en los Playoffs, sin embargo aún tiene 24 años y muchas ganas y energía que dejar en la pista. Por desgracia, de energía no se gana, sino de calidad, y a David Nwaba le falta demasiada.