Chicago Bulls se lleva otra anormal y ajustada victoria contra Jazz

Utah Jazz 86-95 Chicago Bulls

Jimmy Butler
Jimmy Butler se puso a los Bulls en la espalda/Jsteperry (CC)

Tras haber perdido 7 de los últimos 8, los Chicago Bulls buscaban, como sea, un halo de luz que les diese algo de esperanza para luchar por unos Play-Offs que cada vez se alejan más. Dicho esto, los locales saltaron a por todas y, sin Wade y Payne, ambos baja por lesión, consiguieron hacerse con otra de sus inesperadas victorias. Por su parte, los Jazz buscaban seguir consagrándose en lo más alto del Oeste.

Como no, Hoiberg cambió de quinteto (por 19ª esta temporada), esta vez cediendo a la titularidad de Nikola Mirotić, que mostró pequeñas aportaciones, sin embargo, el rey de la noche fue Bobby Portis (junto a Jimmy Butler y Denzel Valentine), que logró anotar 22 puntos, el máximo de su carrera.

Los Utah Jazz empezaron fuerte y, junto al tradicional empane de los de Hoiberg al principio, el encuentro comenzó marcado por la temprana gran ventaja para los Jazz, que dominaron también los tableros (7 puntos tras segunda oportunidad) para empezar 15-4 ganando. El cuarto acabó 23-16 para los visitantes, con 6 puntos de Hayward y 8 de George Hill. Tras el primer periodo, los Bulls comenzaron a entrar en el partido, y Portis a sentirse cómodo en pista tras salir desde el banquillo. A falta de 3 minutos, el marcador lucía un 26-22 para el Jazz. Flashes de Michael Carer-Williams y Paul Zipser dejaron a los Bulls perdiendo 44-40 al descanso. 13 puntos de Portis y 8 de Butler guiaron a los locales, mientras Hayward (10) y Hill (11), guiaban a los pupilos de Qynn Snider.

2 buenos cuartos de los Bulls (+13 en total), les permitieron, gracias a Valentine y Portis, conseguir la victoria en un United Center que echaba humo en el emocionante final. Muy decisivo Valentine, bien Carter-Williams, y 2 robos cruciales de un Butler que ya se acostumbra a decidir partidos desde la defensa. A pesar de los esfuerzos de George Hill, Gordon Hayward y Rudy Gobert, la gran defensa de Utah no fue capaz de tumbar a unos Bulls que se recuperan para intentar pelearlo todo.