La transformación defensiva de los Minnesota Timberwolves

Cuando Tom Thibodeau llegó a Minnesota Timberwolves a principios de temporada el objetivo era claro: concienciar a los jóvenes talentos de la plantilla de que un equipo ganador se construye en base a una buena defensa. El entrenador tenía claro que sólo con una innata y evidente capacidad ofensiva no bastaba para que funcionara el proyecto de los Timberwolves y se puso manos a la obra para que Towns, Wiggins, LaVine y compañía se pusieran las pilas también en el aspecto defensivo.

A principios de temporada, los resultados cosechados por el equipo no fueron los deseados y eso fue debido, en gran parte, a que no se dio esta mejoría defensiva que tanto buscaban los Wolves. El equipo atacaba bien, sobre todo en las primeras partes de los partidos, pero tras los descansos se venía abajo y permitía remontar a los equipos rivales debido a una relajación defensiva tan sorprendente como impropia en una plantilla entrenada por Tom Thibodeau.

Esta situación llegó a hacer que hubiera gente que dudara de la capacidad de dicho entrenador para liderar el proyecto de los Wolves, pero lo cierto es que el tiempo ha dado la razón a aquellos que pidieron paciencia para Thibs. Con la perspectiva de tener los PlayOffs aún a tiro, los de Minnesota han experimentado una mejoría muy importante en el apartado defensivo.

De los últimos diez partidos, los Timberwolves han ganado seis, entre los cuales se encuentran victorias sobre equipos del calibre de Toronto Raptors, Utah Jazz, Los Ángeles Clippers o Golden State Warriors, todos bien asentados en los PlayOffs y con balances positivos de victorias – derrotas. Pero lo llamativo de verdad es la manera en la que se consiguieron esas victorias. En los seis partidos previos a la victoria contra los Warriors, los Wolves eran líderes de la NBA en cuatro de los aspectos defensivos más importantes de estadística avanzada de la liga:

• Defensive rating (Ratio defensivo): Durante esas seis fechas, los de Thibodeau recibieron 97,3 puntos por cada 100 posesiones de los equipos rivales, siendo los que menos puntos encajaron de toda la Liga.
• Net rating (Ratio diferencial): Los Timberwolves fueron los que más diferencia de puntos sacaron a sus rivales por cada 100 posesiones, con 10,7.
• Porcentaje de acierto de los rivales: En los enfrentamientos contra los Wolves, sus rivales anotaron sólo con un 47,6% de acierto en tiros de campo.
• Diferencia de rebotes: Otro aspecto indispensable en la defensa es la recuperación de rebotes y en eso también fueron líderes los Wolves en dichas fechas, ya que cogían 11,2 rebotes más que sus rivales.

Estas estadísticas nos muestran la evidente mejoría defensiva que comentaba todo el mundo que veía jugar a los Timberwolves. Otros datos muy interesantes nos dicen que en el enfrentamiento contra Golden State Warriors los de Minnesota dejaron a los californianos en 102 puntos, cuando venían promediando 116. Utah Jazz, un equipo que promedia 100 puntos por encuentro, llegó únicamente a 80 en su partido contra los de Thibodeau.

Lo que está claro es que los Minnesota Timberwolves se han decidido a ganar partidos desde atrás y que, si consiguen mantener el ritmo anotador a pesar del desgaste físico que supone una gran defensa, van a tener opciones de llegar a la octava plaza de la Conferencia Oeste que da acceso a los PlayOffs de la NBA, lo cual sería un premio muy importante al trabajo de un grupo de jóvenes jugadores y un entrenador que seguro que traerán más temprano que tarde muchas alegrías a los aficionados del Target Center.