Brad Stevens y los Boston Celtics se enfrentan a nuevos desafíos
Sobre el juego de Thomas, la ausencia de Bradley y la emergencia de Brown
No hay secretos en la NBA de hoy, el impacto de la información en cómo minimizar las virtudes del rival están a la orden del día. Con la presencia de Isaiah Thomas (#2 anotador de la liga), y la ausencia de Avery Bradley (segundo goleador y reboteador del equipo), los rivales tratan de implementar cambios tácticos para poder sacar ventaja y exponer las debilidades de los de Massachusetts.
Isaiah Thomas y las ventajas que genera para Boston
Está más que claro que Isaiah Thomas es el problema número uno para los rivales de los Boston Celtics, su alto poder de goleo tanto en la pintura, como desde la línea de tres puntos, ha llevado a implementar diferentes modificaciones defensivas que van desde el cambio de marca directo, a la marca personal en toda la cancha y en los últimos encuentros, que le atrapen en situaciones de pick and roll alto.
A sabiendas de la gran velocidad de despegue del base de Tacoma ante el mas mínimo espacio dejado por el rival, sumado a su alta anotación global, en el equipo ha llevado a los rivales a elegir quién quiere que les anote. Para esto, han relegado el marcaje sobre algunos jugadores para doblarla en el perímetro cuando se produce una situación de bloqueo alto sobre la pelota y cuyo destinatario es Isaiah Thomas, veamos:
El nuevo desafio de Thomas el «trap» en pick and roll alto. pic.twitter.com/Jv69JtSdYk
— ANDRÉS (@avillar9) 11 de febrero de 2017
Brad Stevens ya afrontó este tipo de situaciones en el pasado, como por ejemplo en los últimos Playoffs: los Hawks utilizaron este tipo de trap para aislar a Thomas del aro y forzarlo a soltar la pelota rápidamente o tratar de generar pérdidas de balón. El coach tomó rápidamente nota de esta situación y puso al base All-Star en situaciones sin balón.
La modificación que se han visto en los partidos más recientes es que el trap no solo lo están aplicando en las situaciones en que Thomas toma un bloqueo central, sino en todo momento, para de esta manera evitar que este vaya hacia el aro sobre su mano fuerte (la izquierda) o logre romper por el centro para crear repliegues en la defensa y dejar solos a sus compañeros de equipo.
Claramente, los rivales prefieren dejar a los demás jugadores abiertos a sabiendas de la falta de talento para crearse sus propios tiros, sobre todo ante la ausencia de Avery Bradley, segundo máximo anotador del equipo.
Thomas se enfrenta a una limitación física que implica lo siguiente: en este tipo de situaciones se complica demasiado, dada su poca envergadura y altura. Esto también produce una consecuencia: que no pueda alcanzar al compañero liberado y le lleve a perder el balón o tomar tiros forzados.
¿No hay solución a esto? Sí la hay, claro que sí, y rápidamente ha sido puesta en práctica. Para evitar la marca del big man, Thomas está tomando más situaciones de aclarado (sin pick and roll) y fuerza a su rival a tratar de detenerlo en el mano a mano.
El otro ajuste que implementó Brad Stevens es el de colocar a Smart o Rozier como organizadores y hacer que Thomas penetre por el lado débil en velocidad y así lograr el suficiente espacio para que pueda romper o tomar el tiro liberado.
La utilización de la velocidad viniendo off ball del lado debil de la defensa permite sacar ventajas a Thomas pic.twitter.com/Dwq6Vi2RxH
— ANDRÉS (@avillar9) 11 de febrero de 2017
Pero el arma letal contra el trap sigue siendo el movimiento de pelota y acá es donde los Boston Celtics sacan ventaja, ya que son de los mejores en la liga moviendo el balón. Téngase en cuenta que, si hay dos jugadores con un atacante, siempre queda alguien solo para poder tomar un tiro cómodo. En el vídeo, Rozier queda liberado: no concreta pero genera una segunda jugada usufructuada por Green.
Si la pelota viaja mas rapido que el jugador siempre se encuentra al hombre libre, Thomas tiene que sacar ventaja del trap pic.twitter.com/qv4TL1vzsU
— ANDRÉS (@avillar9) 10 de febrero de 2017
Otro ajuste al trap es la utilización de «pantallas falsas«. Esto genera que el pívot que va a hacer el marcaje tenga que continuar con su marcador al no ejecutarse el pick y «la caída» del big man, ahí es donde Thomas saca ventaja de su velocidad al crearse el espacio.
Los «falzos bloqueos» aportan otra via de escape al trap, vean a Green y Olynyk como simulan la pantalla y arrastran al defensor del atrape. pic.twitter.com/DLWg4Zdedf
— ANDRÉS (@avillar9) 11 de febrero de 2017
Claramente esta táctica es complicada de contrarrestar si no se tiene el acompañamiento de todos los jugadores tanto en movimiento como en efectividad para castigar doblaje sobre un compañero. Thomas debe explotar sus virtudes (velocidad e inteligencia) para limitar sus carencias (envergadura y altura). Como mostramos, hay soluciones disponibles que deberían tomarse en cuenta para ser ejecutadas.
Avery Bradley: ausencia e impacto en el quinteto
No vamos a descubrir acá la importancia a nivel defensivo y ofensivo de uno de los mejores jugadores perimetrales de la conferencia Este porque eso ya lo ha hecho Javier Rodríguez, del Despacho. Lo que vamos a traer aquí es cómo Brad Stevens se las ha arreglado para disimular la ausencia de 18 pts y 7 rebotes por partido en Boston.
En un primer momento, la decisión fue la de llevar a Marcus Smart a la alineación titular, pero durante esos partidos quedó claro que la segunda unidad no podía quedar huérfana del caudal de baloncesto que aporta el de Texas, tanto armando juego, como defendiendo y reboteando (y sacándole la pelota de las manos a Rozier, que no es poca cosa).
Fueron tres derrotas consecutivas las que alertaron a Brad Stevens sobre lo que estaba ocurriendo. Ahí fue cuando se le ocurrió una nueva idea: colocar a Jaylen Brown en la posición de escolta (algo que discutíamos internamente con Alvaro Méndez). La introducción del rookie en la primera unidad fue un bálsamo prácticamente inesperado, ya que no venía de realizar grandes actuaciones y su nivel defensivo dejaba mucho que desear. Pero para sorpresa de propios y extraños, el de Georgia revolucionó el apartado destructivo de los cinco iniciales.
No solo el sistema se volvió más flexible en cuanto a los cambios de marcaje, sino que demostró y sigue demostrando una evolución gigante en la comprensión del sistema (complejo como pocos). Brown aporta rebote y defensa comprometida, algo que estaba escaseando por estos tiempos en Massachusetts.
Otra muestra del despliegue físico en defensa de Brown que le aporta muchísima movilidad al sistema de Stevens pic.twitter.com/M4kbp81bYc
— ANDRÉS (@avillar9) 7 de febrero de 2017
Desde la entrada del ex Golden Bear, los Boston Celtics están 8-1 y pueden tomarse con más tranquilidad la recuperación de su escolta titular. Sus números se incrementan partido a partido promediando 12 puntos, 5.35 rebotes, 1 robo y 1 asistencia en 25 minutos por partido.
Todavía sigue cometiendo errores de manejo (claramente su punto más débil) y algunas falencias de novato normales para un chico con su nivel de experiencia. Pero de continuar de esta manera, vuelve a resurgir un debate en el seno del despacho: ¿qué ocurrirá cuando retorne Bradley? O: ¿hay chances de que el escolta de Boston lo haga de sexto hombre?
Hay opiniones divididas. Coincidiendo con Javier Rodríguez, tomamos la postura de hacer la prueba, siempre manteniendo el nivel de minutos de Bradley en su totalidad, ya que como dice y aporta Alvaro Méndez, se necesita de la defensa asfixiante del #0 sobre el base contrario para producir desgaste.
Convertir a Bradley en un sexto hombre productivo en los dos costados de la cancha puede darle un salto exponencial a la segunda unidad (uno de los puntos flacos de este equipo) y seguir aportando sus aptitudes para cerrar el partido como un titular más. Veremos si Stevens se anima a modificar este aspecto de Boston. Mientras tanto tiene por delante no solo una gira complicada, sino también afrontar nuevos desafíos tácticos como hemos observado.
