La semana del morbo para Kevin Durant

Desde que el 4 de julio del 2016 KD decidió firmar por los Golden State Warriors, nada volvió a ser igual. Kevin Durant se embarcó hacia La Bahía con un solo objetivo: ayudar al -sorprendente- subcampeón de la NBA a obtener el anillo que ganaron por última vez en la temporada 2014-15 y se les resistió en la de las 73 victorias en la temporada regular, pese a estar 3-1 en ventaja frente a los Cleveland Cavaliers en Las Finales, para así, adjudicarse, por fin, el tan ansiado trofeo Larry O’Brien.

Los Golden State Warriors de entrada se mostraron muy ilusionados con esta incorporación. El equipo cada vez carbura mejor, marchan primeros en la liga y 4 dubs jugarán el All Star Game. No obstante, no todo es color de rosas para Kevin Durant. Es casi imposible dejar a todos satisfechos. Como era de esperar, en Oklahoma quedaron muy enojados con la decisión del jugador que logró el MVP defendiendo la camiseta del Thunder. De entrada, los fans de OKC tomaron muchas medidas para mostrar su descontento: desde quemar y abandonar camisetas con el dorsal 35 de KD hasta vender los jerseys con su número y apellido a 48 centavos de dólar. Una situación similar vivió LeBron James, cuando decidió dejar sus Cleveland Cavaliers para jugar en los Miami Heat.

De todas maneras, KD ya parece haber superado (si es que en algún momento le afectó) el acoso que recibió por las redes sociales al decidir cambiar sus Thunder de toda su carrera profesional por el superequipo de San Francisco. Y cuando todo parecía estar en orden, con el equipo más que firme (récord de 39-7 en lo que va de la temporada) y Kevin Durant asentado en el juego del equipo, forjando una gran química junto a sus compañeros y jugando a un altísimo nivel, al jugador drafteado por los entonces Seattle Supersonics en el 2007 se le vendrán unos días muy intensos.

A partir de dos fechas puntuales que se detallarán a continuación, se plantean los siguientes interrogantes: ¿Cómo reaccionará KD? ¿Influirán estos eventos en su rendimiento?

1- La vuelta a Oklahoma (11/02)

Sí, ni más ni menos. Kevin Durant volverá a su casa, a la ciudad que lo acogió durante 8 años. Regresará al Chesapeake Energy Arena, pabellón que lo vio llegar a unas Finales de la NBA, levantar el premio al Rookie del Año, adjudicarse el tan preciado trofeo Maurice Podoloff, que premia al MVP de la temporada regular y hacer magia con las manos en una cancha de baloncesto. Claro está que KD dejó amigos en OKC, por lo que su vuelta será muy especial. También es cierto que sus ahora ex-compañeros se sintieron traicionados por el 8 veces All Star, por lo que la relación cambió. De hecho, ya protagonizó algún altercado con Enes Kanter y Russell Westbrook: con el turco se cruzó en el primer partido en el que se enfrentaron en La Bahía, mientras que con Russ, su compinche en Oklahoma City (punto 2), protagoniza una historia que parece no tener fin. Este cuento tiene un importante tinte mediático, ya que se intenta maximizar todo para vender. De todas formas, seguramente a Westbrook le molestó la salida de KD: declaraciones cruzadas, algún insulto al aire y muchas noticias y artículos (como este) conforman una incesante novela entre dos de los mejores jugadores de la NBA.

El 11 de febrero Durantula volverá a Oklahoma City. De todas maneras, ya se enfrentó con sus ex-compañeros dos veces en la presente temporada, con victoria para los Warriors en ambos juegos. Lo curioso es que son los dos partidos en los que más puntos anotó en todo lo transcurrido de la regular season (39 y 40 respectivamente). Está más que a la vista que a KD lo motiva jugar ante el Thunder. De todas maneras, no es lo mismo enfrentarlo de local, en el Oracle Arena (así fue en las dos contiendas hasta el momento), que en el Chesapeake Energy Arena, estadio en el que será, seguramente, silbado e insultado como nunca en su vida.

Hay que ver si Durant hace oídos sordos a lo que le puedan llegar a gritar, y firma otro gran juego, como hizo hasta el momento con la camiseta del equipo de Oakland y más enfrentando a su ex-equipo. Sus números en los dos partidos en los que se enfrentó al Thunder fueron:

–El 3 de noviembre del 2016, en el 122-96 de los Warriors al Thunder: 39 puntos, 7 rebotes, 1 asistencia y 1 tapón.

–El 18 de enero del 2017, en el 121-100 de los Warriors al Thunder: 40 puntos, 12 rebotes, 4 asistencias y 3 tapones.

2- Durant junto a Westbrook en el ASG (19/02)

Este quizás no sea un dato muy significativo, pero Kevin Durant volverá a jugar junto a Russell Westbrook ¡en el mismo equipo! Claro, KD cambió de equipo pero no de conferencia, por lo que ambos eran elegibles para el mismo equipo (West) del All Star Game, que se desarrollará en New Orleans el 19 de febrero (el All Star Weekend tendrá lugar entre el 17 y el 19 del mencionado mes).

El caso es que el jugador que protagonizó el fichaje más importante y resonante del último mercado de agentes libres fue electo como titular para el partido de las estrellas mediante el nuevo sistema (un 50% de los votos corresponde a la elección popular, un 25% a la decisión de la prensa y el 25% restante al dictamen de los jugadores de la liga). En tanto, Westbrook, insólitamente no entró en el equipo titular de la conferencia oeste, a pesar de haber quedado en el primer puesto entre los guards de dicha conferencia en la consideración de los medios y sus colegas. Esto se debe a que Stephen Curry y James Harden quedaron igualados en puntos con Mr Triple Double, pero este último quedó relegado del quinteto inicial ya que, en caso de empate, se sobrepone la elección de la gente (Curry quedó en primer lugar, Harden terminó segundo en este aspecto y Russ, tercero). Suena (y es) insólito que un jugador que a esta altura de la temporada promedia un triple doble (algo que, finalizada la temporada, sucedió una vez en la historia -lo hizo Oscar Robertson-) no esté de inicio en el All Star Game, pero así funciona la selección de jugadores para uno de los partidos más esperados de la temporada. Esto resulta hasta cómico, ya que es el máximo candidato para ganar el MVP. De más está decir que fue elegido por el entrenador del oeste para estar en el banquillo.

A pesar de esto, una de las mejores duplas de la NBA hasta mediados del año pasado, formará parte del juego de las estrellas. Hay que ver cómo se llevarán el 35 y el 0, si rendirán como en Oklahoma, donde no lo hicieron nada mal. Lo seguro es que será llamativo verlos juntos en un equipo (aunque, por lo expuesto anteriormente, quizás no compartan tantos minutos en el parqué) e, incluso, un tanto divertido, ya que volverán a pasarse el balón después de haber protagonizado una supuesta pelea mediática tras la partida del actual jugador de los Golden State Warriors.

La pregunta es si se podrá sobreponer el polifuncional alero a estos eventos y seguir con su gran nivel. Sin lugar a dudas, serán unos días muy movidos e interesantes en el ambiente del baloncesto estadounidense.

¿Volverá a realizar un partidazo ante Oklahoma City Thunder el crack de los Warriors? ¿Cómo será el reencuentro con el público que lo acogió tantos años? ¿Y el hecho de jugar junto a Russell Westbrook en el mismo equipo? Lo único seguro es que serán ocho días intensos y agitados. Yo creo que el jugador nacido en Washington D.C., en el partido que tendrá lugar en Oklahoma City, no tendrá inconvenientes en continuar con su habitual rendimiento, haciendo oídos sordos al marco del partido y, en el ASG, no habrá inconveniente alguno con Westbrook, dado que son dos profesionales y grandes jugadores.