Isaiah Thomas: «Siento que soy el mejor jugador del mundo»

Isaiah Thomas, podemos decirlo ya sin miedo: jugador franquicia de los Boston Celtics, estuvo esta semana en el podcast de The Ringer, donde concedió una más que interesante entrevista a uno de los periodistas de cabecera en este humilde Despacho, Kevin O´Connor.

En ella revela cómo había logrado pasar de ser la última elección en el «NBA Draft 2011« al segundo máximo anotador de la NBA y jugador más relevante del tercer mejor equipo de la Conferencia Este: «Creo que lo que me diferencia de los demás es que siempre he trabajado para estar listo y aprovechar mi oportunidad el día que esta llegase». Sobre este tema recordaba aquello que le dijo Jason Terry cuando el pequeño jugador de Tacoma era aún un prospesct: «Las oportunidades no desaparecen, se van a otros jugadores. Hay quien tiene una oportunidad y la malgasta porque no estaba listo en ese momento para aprovecharla. Así que yo siempre traté de mantenerme preparado para cuando se diese el momento».

Isaiah Thomas está firmando este Enero (33.2) el 3º mejor mes en la historia de los #Celtics , solo por detrás d Bird (33.3) y Pierce (33.5)

— Javier R. Rodríguez (@CafeDeRick) 23 de enero de 2017

Tras desbancar a cualquiera que se le pusiera por delante en la rotación de los Sacramento Kings, Thomas cerraba su tecera temporada en California firmando más de 20 puntos por partido; algo que no le valió para ganarse la confianza de una directiva que firmó a varios veteranos para suplir su baja y un sing-and-trade que le mandaba al desierto de Phoenix: «Sentía que me faltaban al respeto. Cada año traían a alguien nuevo».

Para su desgracia, en los Suns el experimento de juntar a tres bases no dio los resultados esperados – ejem, ejem, Stevens… – y mandaron a Thomas a cambio de caramelos y chuches a unos Boston Celtics donde por fin encontró lo que siempre había estado buscando en la NBA: un equipo y un cuerpo técnico que le quisieran tal y como es, dispuesto a montar un proyecto alrededor de su juego. «Danny Ainge estaba visiblemente emocionado por contar conmigo y me dijo que por la forma que yo tenía de jugar al baloncesto podría llegar a convertirme en una leyenda de esta franquicia. En el momento pensé que se debía todo a la emoción por haber firmado un buen traspaso».

Como dirían algunos, lo que pasó después es historia. Isaiah Thomas ha emergido como el líder de un equipo que ha jugador Playoffs cada año desde su llegada, que va camino de participar en su All-star y quién sabe si de arrancar algún que otro voto en la votación por el MVP. Sobre todo esto habló la semana pasada con alguien que sabe de primera mano lo que es llegar a Massachusetts y convertirse en leyenda por su forma de ser y jugar, Kevin Garnett.

«Me agarró y me dijo directamente: ‘Sé tú mismo. Sigue lo que te dicen tus pelotas. Dices que tienes unas pelotas muy grandes; síguelas. Si ellas están contigo, te van a seguir, si no lo están, te van a dejar de lado. Así que síguelas'»

(Un ordenador viejo, 20 euros en el banco y un montón de cómics. Todo eso poseo en el mundo ahora mismo. Lo arrojaría todo a la hoguera por hablar 20 minutos con Kevin Garnett.)

Donde Thomas está especialmente dejando su sello es esta temporada es en el último cuarto de los partidos. En este sacrosanto territorio donde se deciden los partidos y se forjan las leyendas, desde que se tienen datos solo cuatro jugadores han promediado más de 8.5 puntos por partido. Ningún jugador desde que se tienen datos (1996), está cerca de los guarismos del #4 y sus 10.1 puntos en los 12 minutos finales de partido, donde además lanza a un irreal 57 % de acierto y con un 67.3 de true shotting. «El último cuarto no es para todo el mundo.Son situaciones más duras, con más relevancias, y el juego suele estar un poco más al límite en esos instantes. Los grandes jugadores abrazan esos momentos».

«Yo quiero ser uno de esos jugadores»