Los Boston Celtics a revisión: la defensa

Les traemos un exhaustivo análisis de la defensa de los Boston Celtics en la primera mitad del campeonato, explicando cuál es su modalidad de juego, sus puntos fuertes y  las oportunidades de mejora que se pueden dilucidar de cara a la pos-temporada.

Sistema Defensivo

La maquinaria destructiva de los Boston Celtics está pensada y pergeñada para tapar sus dos problemas más evidentes: la falta de estatura  y sus desventajas de peso en la pintura.

¿El objetivo se ha logrado en esta primera parte de la temporada? No, claro que no. Los “Orgullosos verdes” se encuentran en caída libre tras un arranque para el olvido (matizado por la falta por lesiones de Al Horford y Jae Crowder) se encuentran en este momento en el puesto 20 y en franco retroceso en las últimas semanas según NBA Stats.

¿Cómo defienden los de Brad Stevens?

Teniendo en cuenta lo que hemos dicho anteriormente, Brad Stevens modificó la estructura táctica de los Celtics confiando en una configuración de plantel mucho más versátil (móvil y dinámica) que la del año pasado. La llegada de Horford le aportó cierta protección del tablero y pudo liberar de preocupaciones internas a los perimetrales, que tuvieron que modificar sus desplazamientos dentro del mecanismo defensivo (el  curso anterior estaba pensado para que la pelota no llegara al poste bajo) este año, más enfocado a los cambios de marca directos y a cargar el rebote en tablero propio.

Los Boston Celtics empiezan y terminan su defensa cubriendo los huecos generados desde el perímetro. Isaiah Thomas, muy propenso a quedar atrapado en los bloqueos altos,  genera la primera descompensación del sistema. Brad Stevens, convencido de que TODOS pueden cambiar marcas, genera el primer intercambio dejando a un hombre alto con el base y a Thomas con un pivot, rápidamente el de Tacoma esperara el socorro de un compañero para cambiar el marcaje y no generar el miss match de altura; si lo logra ya habrán pasado tres cambios en pocos segundos. La dificultad principal de esto es que requiere de un nivel de atención máximo y donde uno de los cinco no está atento, el sistema colapsa.

¿Pero que ha cambiado con respecto al año anterior?

La concepción de atrape del pick and roll es la misma, el «ice defense» sigue presente pero con la salvedad de que si el jugador exterior no puede salir de la cortina se genera el cambio de marcaje automático. El primer desequilibrio se produce ahí, pero generalmente los Celtics lo resuelven en primer instancia. El gran inconveniente es después, en la continuación de la jugada, ya que a diferencia de la temporada 15-16 los perimetrales no tienen el objetivo de presionar el balón y cortar línea de pase, si no que tiene que estar atentos a cubrir espacios producidos por los intercambios o atentos a doblar al atacante si se produce un miss match de altura (ejemplo un perimetral posteado con un interno).

Por si fuese poco, el mismo mecanismo tiene sus puntos débiles que tratan de ser explotados por los equipos contrarios. Ante una defensa que tiene que constantemente cambiar de marcar y recuperar posiciones de espacios vacíos generados por swichs adicionales como el que mencionábamos. ¿Qué hace el rival? Mueve constantemente la pelota para generar espacio a los tiradores y ahí es donde flaquea el sistema, ya que ante el tercer o cuarto ajuste el defensor no logra contestar el tiro, más que nada si la pelota viaja de adentro hacia afuera como vemos a continuación.

Los cambios y las desatenciones del lado débil están haciendo pagar a los #celtics pic.twitter.com/Arc4l1Yyqa

— ANDRESSS (@avillar9) 21 de enero de 2017

Verán muchas veces por partido a Horford desesperado por llegar al perímetro a disputar un tiro, generalmente de un cuatro abierto. El dominicano es un jugador rápido, pero que pierde ante aleros móviles con buen disparo de larga distancia (en este caso es una simple ayuda y no puede contestar el tiro); es aún más grave cuando viene de hacer varias recuperaciones (ya vimos reiteradamente como lo han hecho pagar Kevin Love, Marvin Williams, Patterson etc).

Horford es un defensor probado. pero los rivales han scouteado que tiene problemas con los aleros livianos y con buena mano. pic.twitter.com/DvA0iN08nK

— ANDRESSS (@avillar9) 21 de enero de 2017

El lanzamiento abierto no es el último inconveniente, porque si no se toma el tiro, se irrumpe por el centro de la defensa que se encuentra desprotegida luego de varias recuperaciones (cuantos rompimientos por el eje de cancha vemos por partido) esto se debe a los continuos cambios, muchos de ellos que no se deben tomar; como entre un perimetral bajo (Bradley o Thomas) con un interno (Amir o Horford). En este caso en particular Olynyk realiza el cambio y Smart pierde a Spencer Hawes.

Cuando se apuesta a un sistema defensivo de cambio de marcación la comunicación es fundamental. Una distracción y lo pagás pic.twitter.com/mEACwFVKu2

— ANDRESSS (@avillar9) 21 de enero de 2017

Por último y no menos importante, los rivales suelen aprovecharse de las debilidades de los jugadores verdes, atacando generalmente con miss match de velocidad a Amir Johnson (le cuesta horrores quedarse delante de un externo) o rápidamente cuando un perimetral  quedan en emparejamientos aprovechables después de haber intercambiado marcación, como vemos en el siguiente video entre Love y Smart.

Otro de los problemas sangrantes de estos celtics ha sido como los rivales aprovechan los cambios que generan miss match pic.twitter.com/lcSePjws4B

— ANDRESSS (@avillar9) 21 de enero de 2017

Por último y no menos importante, yo diría a esta altura sangrante, el rebote defensivo queda completamente liberado al jugador que se encuentre en ese momento ocupando posiciones internas (y justamente  por lo que veníamos explicando, raras veces es un interno), salvo que en la jugada no haya habido cambios considerables. Si los Celtics, de por si, no tienen internos que se caractericen por cerrar el rebote de manera eficiente y a esto le sumamos que muchas veces quedan fuera del rango de rebote, es una combinación altamente explosiva para el objetivo de detener al rival y evitar tiros fáciles.

Conclusión

Teniendo en cuenta la altura del campeonato, no se espera una gran modificación en el sistema defensivo, por lo menos  hasta el receso del All Star, donde se puede practicar por unos días (Stevens suele darle descanso a los jugadores) por lo que no veo rápidamente un viraje de 180 grados.

Lo que se puede hacer  en todo caso, es tratar de disimular estos inconvenientes, poniendo en cancha a los jugadores que mejor papel pueden desempeñar en el sistema o que por lo menos no exponer  tantas debilidades del mismo.

En este momento según NBA Stats la alineación más eficiente en los dos costados de la cancha cuenta con: Thomas, Bradley, Crowder, Olynyk y Horford.  Dicha formación, tiene un NET rating (diferencial entre rating ofensivo y rating defensivo cada 100 posesiones)   de +23, con un exorbitante 125.3 pts en ofensiva y un excelente 102.2 pts en ratio defensivo (esto es elite en la liga).

¿A qué se debe esto?

Teniendo en cuenta la alta movilidad en campo propio, el quinteto del que estamos hablando combina un excelente desplazamiento defensivo y una flexibilidad gigante en el costado ofensivo, abriendo la cancha para Thomas y dejando en el perímetro a los mejores tiradores del equipo. Al replegarse en defensa, se puede contener mejor los cambios en el perímetro, ya que Olynyk es muy bueno moviendo los pies ante jugadores más  bajos y rápidos, cuestión que expone a  Amir Johnson en reiteradas oportunidades.

El único punto débil esta alineación es que Horford tiene que hacerse cargo del pívot más fuerte, teniendo en cuenta que Olynyk sufre en el poste ante internos más potentes físicamente. El dominicano ha estado reacio a ocuparse de éstos, delegando dicha función a Amir Johnson, alegando cuestiones de desgaste.

Observen específicamente cuando se habla de la defensiva de Kelly en este compilado defensivo en la temporada pasada (minuto 4.15)

Desde mi punto de vista la solución al problema es volver a basar la defensa en la presión sobre la pelota y en estrangular a los rivales cortando línea de pase y obligándolos a tomar tiros desde posiciones de baja efectividad como hacia el equipo el año anterior. Dejando los cambios de marca solo para los intercambios convenientes. Lamentablemente, no veo a Stevens tomando una decisión de este tipo, creo entender que sigue apostando al cambio de marcaje porque cree que genera menor desgaste físico que el sistema anterior.

La alternativa de encontrar una alineación que pueda palear esto es un plan B, pero puede hacer mejorar la eficiencia del equipo en el que claramente es su punto más débil por el momento