Edwin Jackson siente el picorcito en Madrid

Vive un momento sensacional

ACB.com

«Ahí está Edwin Jackson, quedan 3 segundos. Se la va a jugar. Jackson de treeeees, tri tri triple de Edwin Jackson. Imparable«, esas son las palabras que Marcos Fernández, narrador en EstuRadio, repite una y otra vez cuando Edwin Jackson coge el balón.

El francés vive un momento dulce en la capital de España, máximo anotador y valorado en una de las ligas más exigentes del planeta. Pero no todo ha sido un camino de rosas.

Hace dos años desde que Edwin dicidió hacer las maletas y dejar su Francia natal para buscar suerte en España.

«Es difícil irse, aquí he vivido cosas increíbles. Pero estoy contento por este nuevo desafío. Sobre todo en un club como el Barça«.

Esas eran las palabras de un emocionado Edwin Jackson en diciembre del 2014, después de que se concretara su salida del ASVEL francés para recalar en uno de los grandes equipos de Europa, el FC Barcelona.

Un anotador insaciable, de hecho, ser el líder en anotación durante la temporada 13/14 en la liga francesa fue su carta de presentación para que Xavi Pascual le hiciese un hueco en su roster para suplir al lesionado Brad Oleson.

No cuajó en Barcelona y Edwin probó suerte en Málaga, bajo las órdenes de Joan Plaza, un entrenador muy metódico y con el que no terminó de conectar. Después de un gran inicio de temporada y actuaciones destacas en Euroliga, el peso del francés en el equipo disminuyó de forma drástica. Su confianza cayó en picado y las canastas dejaron de entrar.

Edwin necesitaba una salida, un cambio. Para colmo, el seleccionador francés, Vincent Collet, dejó de contar con el escolta, que no estuvo en el preolimpico de Manila.

El 17 de agosto la vida de Edwin Jackson vivió un cambio. El Movistar Estudiantes logró hacerse con sus servicios, un fichaje que sorprendió a propios y a extraños, un auténtico bombazo para los del Ramiro y una oportunidad para Edwin de reivindicarse en un equipo en el que sería el líder, como en el ASVEL. Un roster hecho a su alrededor y con un entrenador, Salva Maldonado, idóneo para sus características.

«He venido a Estudiantes para volver a disfrutar, tendré más minutos, es un nuevo reto para mi, quiero ganar más experiencia y respeto en la ACB«.

Solobasket

Dicho y hecho. Apenas tres meses después de su presentación oficial como jugador de Movistar Estudiantes, el francés ha superado todas las expectativas, tanto que desde su país natal le empiezan a conocer como «el Rey de España».

A nadie le extraña. «Es muy trabajador, hace horas extra casi todos los días. Está muy mentalizado en ayudar a crecer al equipo. Además hace piña, propone muchos planes, no es el típico extranjero que venía a jugar sus minutos y meter sus puntos«, apuntan desde el club.

Con un año de contrato, en las redes sociales ya hay quien le pide a Willy Villar su renovación, incluso desde el propio vestuario hay quien alucina con el juego del francés y su presencia en un equipo modesto como el madrileño, «hay veces que en partidos empieza a meterlas y piensas, ¿cómo Edwin está en el Estudiantes? Debería estar en un equipazo«, nos contaba Darío Brizuela a principio de temporada.

A pocas horas de que comience la duodécima jornada de Liga Endesa, Edwin Jackson ha logrado su objetivo, ha vuelto a disfrutar del baloncesto. Prueba de ello son los 20.9 puntos y 20.7 de valoración que promedia, líder destacado en ambas estadísticas en la Liga Endesa, números que redondea con 3.1 asistencias y 4.7 rebotes.

Lo cierto es que la afición de Movistar Estudiantes está encantada con el francés, pletórico de confianza, «es buenísimo, tiene flow. Siente el picorcito«, decía un aficionado el pasado domingo, después de la enésima exhibición de Edwin Jackson, que tumbó al Morabanc Andorra con 24 puntos, 10 rebotes, 4 asistencias y 24 de valoración.

 

Siente el picorcito, se siente importante, saluda a unos y a otros, siempre con una sonrisa. Ayuda a los jóvenes en cada entrenamiento. Está involucrado al 100% con el club. En sus días libres se acerca al Magariños para seguir mejorando, incluso entrena con jugadoras del equipo femenino. Todo sea por mejorar.

Un equipo compensando, con una estrella que brilla por encima del resto y de la que se espera que mantenga el ritmo hasta que el cuerpo le aguante, ¿un problema? Salva Maldonado no opina lo mismo: «Tener al máximo anotador de la Liga tiene su parte buena, prefiero tenerlo en mi equipo, estamos encantados con él, trabaja bien, quiere ganar, y además mete puntos, no le voy a criticar«.

Movistar Estudiantes cabalga décimo en la clasificación general, con 4 victorias y 6 derrotas, un terreno engañoso, pues el abismo del descenso está a tan solo una victoria, algo más próximo que las dos victorias que separan a los madrileños de los ocho primeros puestos que dan acceso a la Copa del Rey.

Si Edwin mantiene el nivel a nadie sorprenderá ver a Movistar Estudiantes peleando hasta final por estar en la Copa del Rey de Vitoria y quién sabe si en los playoffs por el título. Lo que está claro es que en Madrid han recuperado a un gran jugador.

¡Qué no pare la fiesta!