Espectacular partido el vivido anoche en el Palacio de los Deportes de la Comunidad de Madrid entre dos de los mejores equipos que cabalgan a día de hoy en la Euroliga. El Panathinaikos se plantó ante el Real Madrid con hasta tres ex jugadores del conjunto blanco, Antonis Fotsis, Ioannis Bourousis y KC Rivers, ovacionados en el comienzo del partido. Además suponía la vuelta de Xavi Pascual a España, su primer partido desde que dejó el FC Barcelona Lassa, un pasado que la afición madridista no olvida y se lo hizo saber en forma de monumental pitada.
Un partido que comenzó igualado y mantuvo esta tónica durante los 40 minutos. James Feldaine, inspirado desde el triple, dio la primera ventaja a los suyos 6-12, con 3/3 en triples para el dominicano, en el ecuador del primer cuarto. El Real Madrid, siempre a remolque, se dejaba llevar ante el dominio del partido de un Nik Calathes muy inspirado, tan solo Jonas Maciulis -9 puntos- era capaz de dar la cara por parte de un Madrid muy errático que logró solventar el primer cuarto gracias a los problemas de faltas del equipo de Pascual, 20-23.
El juego del PAO pasaba por las manos de su pareja interior, Singleton-Bourousis. El griego, muy motivado contra su ex equipo, se erguía como el eje del ataque griego ante el problema de faltas de Calathes, que le enviaron al banquillo. Con 32-38 a 04:00 y con Laso sin dar con la clave, se alzó la figura del indomable Llull, el base menorquín monopolizó el ataque blanco, y con 8 puntos seguidos logró voltear el marcador ante el delirio de sus incondicionales, que coreaban su nombre. Trey Thompkins, inédito hasta el momento, tomó el relevo de Llull con 8 puntos sin fallo. El partido se fue al descanso con un igualado 53-50.
Volvieron los equipos del paso por el vestuarios con la sensación de que el libertinaje ofensivo de la primera parte iba a desaparecer en la segunda. Las defensas se endurecieron y Calathes se hizo con el control del tempo hasta voltear el partido, 61-64 a mitad del tercer acto. Pero era la noche de Llull y nadie lo podía remediar, el de Mahón volvió a tomar las riendas del equipo, 12 de los 19 puntos del Real Madrid en este cuarto llevaron su firma, y un último arreón suyo cerró el cuarto, 72-68.
Con el partido más vivo que nunca decidió Pablo Laso dar descanso a su arma letal. El ataque blanco no encontró continuidad en ningún otro jugador, algo que aprovechó el PAO, gracias a un excelso Nik Calathes, que manejaba el partido a su antojo, anotando y repartido asistencias -hasta 9 al final del partido-. Los griegos volvieron a ponerse por delante mediado el cuarto definitivo, 77-79, y Laso tuvo que reaccionar, «Sergi, a pista«, y allá que fue el bueno de Llull.
EL ÚLTIMO MINUTO.
Feldeine, con otro triple -6/7- puso las cosas cuesta arriba a falta de un suspiro, 83-84. Pero apareció la maquina, otra vez. Sergio Llull desde el triple puso el 86-84. Feldeine perdió un balón capital y Carroll desde el tiro libre dejó las cosas en chino para los griegos a falta de 3.8 segundos, 87-84. El equipo heleno puso el balón en juego desde el campo blanco, y Xavi Pascual decidió que fuese KC Rivers quien se jugase la bola más caliente. El de Carolina del Norte erró el lanzamiento y el Real Madrid sumó su quinta victoria a dos días de medirse al FC Barcelona Lassa en la que será la octava jornada de esta frenética Euroleague.
- La nota negativa la puso James Gist, mediado el último cuarto sufrió un golpe que le obligó a salir del partido a hombros de sus compañeros, después de varios minutos tumbado en la pista con visibles gestos de dolor. Xavi Pascual se refirió a este tema con preocupación, «no pinta bien, mañana se le harán pruebas«.
Real Madrid (21+32+19+15) 87 – Llull (21) Doncic (-) Maciulis (9) Felipe (-) Ayón (8) – Randolph (12) Draper (2) Rudy (8) Carroll (6) Hunter (4) y Thompkins (8).
Panathinaikos (23+27+18+16) 84 – Calathes (15) Feldeine (19) Nichols (-) Gist (8) Bourousis (13) – Singleton (13) KC Rivers (8), Fotsis y Bochoridis.