Tras haber conseguido la primera victoria de la temporada ante el Manresa en la pista de estos, el Divina Seguros Joventut quería asegurarse la primera ante su público contra un Unicaja de Málaga que venía de ganar al Baskonia.
El primer cuarto fue una total declaración de intenciones por parte de ambos equipos. En primer lugar, fueron los locales quienes endosaron un parcial de 6-0 con un ritmo muy alto. Pero los visitantes, lejos de quedarse atrás, rápidamente respondieron para que a mediados del periodo, el marcador estuviera en 12-11. El Joventut se estaba valiendo del gran juego de sus interiores, primero Albert Miralles con seis puntos en los primeros minutos y luego el nuevo fichaje, Jerome Jordan, dominaban la pintura. A la vez, los exteriores también acompañaban con acierto exterior. Pero aún así, los malagueños encontraban respuesta para cada golpe y con una buena defensa, lograron rápidas transiciones para acabar el período con un parcial de 1-7 y dejar el marcador en 22-24.
Si en el primer cuarto decíamos que el Divina Seguros Joventut se valía del juego interior, en el segundo cuarto se sirvió de un gran acierto exterior encabezado por el base Albert Sabat (8 puntos y 5 asistencias al final de la primera mitad) acompañado por Albert Ventura y Luka Lapornik. En el Unicaja eran Carlos Suárez y Alberto Diaz quienes evitaban que el gran momento del Joventut no rompiera el partido. Con eso, el marcador al final de la primera parte se quedó en 48-40 para los locales.
En el tercer cuarto el dominio local con el liderazgo de Albert Sabat, que demostraba que lo que hizo contra el Manresa no era cosa de un día, se prolongaba y a mediados el período ya superaban la diferencia de dos dígitos. Y a partir de ahí, cuesta abajo para el Joventut. Los visitantes pusieron en práctica una presión que les concedió algunos robos de balón y el descontrol en ataque de los locales que ya no gozaban de ocasiones para lanzar tiros claves. Eso sumado a las visitas de los visitantes a la línea de tiros libres, provocó que el Unicaja se fuera a los diez minutos finales liderando el marcador por 63-64.
Al inicio del último cuarto se notaba la tensión entre ambos equipos y empezaron con diversos errores que provocaron dos minutos sin anotación hasta que Unicaja abrió la lata y convirtió un partido en un toma y daka. Donde si los visitantes anotaban una de dos, los locales respondían igual y si era de tres, lo mismo. Siempre con el Unicaja liderando. Los últimos minutos fueron totalmente no aptos para cardíacos. Con ambos equipos muy agresivos y alternando la ventaja en el marcador no había ningún candidato claro a llevarse el partido. A falta de 13 segundos Sergi Vidal anotó dos tiros libres que ponían a los suyos cuatro por delante en el marcador. A falta de 7 segundos, el Unicaja se volvía a poner a dos. Entonces Luka Bogdanović visitó la línea de tiros libres y anotó uno que sería el definitivo para la victoria del Divina Seguros por 82-79.
