Detroit Pistons, confirmando las buenas sensaciones

NEW YORK KNICKS 89-102 DETROIT PISTONS

stan van gundy
Los Detroit Pistons demostraron gran seriedad en los minutos decisivos. Keith Allison (CC)

En la pasada madrugada, el Crystal Palace de Auburn Hills presenció por tercera vez en la primera semana de la regular season un partido de la NBA, en el que los New York Knicks de Carmelo Anthony y Derrick Rose llegaban a Michigan con el objetivo de arrancar una victoria que les diese suficiente confianza para poder comenzar a encajar los engranajes del juego del equipo. Sin embargo, Van Gundy y sus Detroit Pistons venían de arrollar a los Magic el pasado domingo.

En el primer cuarto, ambos equipos comenzaron con ritmos ofensivos parejos, poco acierto pero anotación similar. Con ello, una vez se iba encarando la mitad del cuarto, los Detroit Pistons fueron despegándose progresivamente de los neoyorquinos en el electrónico. Sin embargo, los Knicks y en especial Derrick Rose no iban a permitir que el partido se les escapara tan fácilmente, y recortaron la diferencia hasta finalizar el cuarto 32-29. En el segundo parcial, algo aletargados, ambos conjuntos no conseguían poner un balón en la cesta, pero a pesar de todo, la iniciativa la mantenían los Bad Boys, reactivando el ritmo del partido en los minutos finales del segundo cuarto, pero, en líneas generales, el partido continuó similar. Tal fue la similitud, que los Pistons replicaron su puntuación del primer cuarto, 64-55 ganaban al descanso.

A la vuelta del intermedio, los Knicks intentaron forzar más errores de los chicos de Stan Van Gundy, pero no hubo manera de conseguir frutos en el intento, y se mantuvieron todo el tercer cuarto rondando los 10 puntos de diferencia, aunque en momentos conseguían reducir la diferencia a un dígito, con acciones repetidas de Melo y Porzingis. No obstante, los Knicks consiguieron meterse en el partido, y finalizaban el tercer cuarto 86-79. En el cuarto final, los Knicks supieron cómo apretarle las tuercas a los Detroit Pistons, se mantuvieron los 12 minutos a la carga, embistiendo la ocasionalmente débil defensa de los Bad Boys. Finalmente, cuando todo apuntaba a que los Pistons iban a sufrir para ganar el partido, los Knickerbockers se desinflaron, y dejaron escapar el partido, que acabó 102-89.

Entre los jugadores más destacados, Tobias Harris se llevó todos los méritos, con 25 puntos y 10 rebotes. En los Knicks brilló Carmelo Anthony, con 24 puntos y 4 robos. El próximo partido de los Detroit Pistons será en Brooklyn contra los Nets, hoy, día jueves 2 de noviembre. Los Knicks intentarán el triunfo en Nueva York también contra los Rockets