El forward australiano Ben Simmons jugó su primer partido como Sixer en la Summer League de Utah Jazz, en la derrota de su equipo 102-94 ante Boston Celtics. Pese al mal resultado, el número 25 firmó con 23:41 minutos jugados, 2/9 en tiros de campo, 6/6 en libres, 10 puntos, 8 rebotes y 5 asistencias. El final de su partido no fue el esperado, ya que por calambres debió abandonar auxiliado la cancha rumbo al vestuario.
En un partido donde tuvo 5 asistencias, su nuevo entrenador Brett Brown había anticipado que Simmons podría ser el base, y ante esta destacada labor expresó:
«Creo que la posición de base es la posición más difícil de jugar en la NBA como jugador de primer año. Me parece bastante imprudente hacerlo jugar ahí, casi injusto. Espero seguir siendo de una forma ambiciosa y creativa, para aprovechar lo que realmente puede hacer, y en el fondo de mi corazón creo que puede hacerlo».
Pese a esto, será más probable con el tiempo, en otras palabras, ver al base Ben Simmons:
«Todo el mundo se retuerce sobre cuál es su versión de un base. Cuando digo base, quiero decir base, base. Tienes la pelota. Se le podía llamar a Isiah Thomas, el viejo Isiah Thomas, de mi generación. Se le podía llamar a Chris Paul . Me refiero al puro base organizador. Hay veces que creo que puede ser un base. No Draymond Green. No LeBron. No Lamar Odom. Eso es un point-forward y lo vamos a hacer jugar como un point-forward«
Simmons tuvo la oportunidad de probar si será capaz de imponerse de la misma manera que lo hizo en LSU o si tiene una gran transición por delante, y él fue cauteloso:
«Creo que va a cambiar. Obviamente no es tan fácil como en la universidad, debido a que estos son los atletas profesionales. Creo que va a haber una gran cantidad de oportunidades, donde pueda encontrar chicos como lo hice hoy, en la temporada«.
