El banquillo de los Bucks, decisivo en la victoria ante los Grizzlies

Tras ver cortada su racha de tres victorias consecutivas hace apenas dos días en su partido contra los Toronto Raptors, Milwaukee Bucks recibía a Memphis Grizzlies en un duelo que se presumía intenso y de poca anotación, lo que terminó ocurriendo, ya que exceptuando el primer cuarto (32-32), pudimos ver como en el resto del partido las defensas se impusieron a los ataques, lo que provocó que el duelo no se decidiera hasta los minutos finales.

En el primer cuarto ninguno de los dos equipos fue capaz de despegarse, con un intercambio de canastas constante en el que Matt Barnes logró 18 puntos (igualando su mejor marca anotadora en un cuarto), siendo sin duda el jugador más destacado del partido hasta ese momento. El partido llegaría al segundo cuarto con el partido completamente igualado (32-32).

En este segundo periodo los Grizzlies consiguieron ajustar su defensa, lo que les permitió alejarse en el marcador gracias a un parcial de 0-10, en el que tanto el propio Matt Barnes como Lance Stephenson conseguían anotar con facilidad y dar las primeras ventajas a su equipo. Sin embargo, un arreón final de los Bucks liderado por Middleton y Antetokounmpo permitió reducir la diferencia hasta los seis puntos al descanso (47-53).

En el tercer cuarto se repitió el guion del segundo, con ambos equipos teniendo dificultades para anotar pero con los Grizzlies manteniendo la pequeña renta obtenida en la primera parte, y donde pudimos ver como Jason Kidd tomaba la decisión de dar minutos a jugadores menos habituales como Tyler Ennis y Damien Inglis, que a la postre terminarían siendo decisivos en el último cuarto, que comenzaría con una ventaja de cinco puntos a favor del equipo de Tennessee (68-73).

El partido llegaba sin decidirse al último cuarto, pero sorprendentemente un parcial de 28-13 de los Bucks permitió al equipo de Jason Kidd hacerse con la victoria. La irrupción de Tyler Ennis, que consiguió 13 puntos (la mayoría de ellos en estos últimos doce minutos), sumada a la gran aportación de un hasta ahora prácticamente inédito Damien Inglis (10 puntos) catapultó a los Bucks a lograr una importante victoria de cara a seguir manteniendo una mínima esperanza de poder clasificarse para los Playoffs.

Al final, 96-86 para unos Bucks en los que seis jugadores acabaron con doble cifra de anotación y en donde la aportación del banquillo recordó a lo vivido durante la temporada pasada, donde habitualmente la segunda unidad era la que permitía al equipo de Jason Kidd sumar victorias, algo que hasta ahora este año se ha visto muy poco. Por su parte, Memphis cosecha su cuarta derrota consecutiva, aunque su presencia en los Playoffs parece más que asegurada.