El Real Madrid puso fin a los malos resultados recientes con una dominante victoria para sumar la quinta en la competición europea. El club blanco decidió dejar atrás todos los problemas que le habían estado torturando durante estas últimas semanas para desplegar su mejor juego defensivo en años.
Dejó al Unicaja en 57 puntos, la mejor marca desde la temporada 2013-14 en Euroliga. Luka Doncic fue el jugador más destacado del partido rozando el triple-doble. Solamente se quedó a cuatro asistencias de lograrlo con unas cifras finales de 13 puntos, 10 rebotes y seis asistencias. Ofensivamente, destacaron Jaycee Caroll con 17 puntos y Rudy Fernández con 14.
Antes del arranque del choque, el eslovena recibió el premio a mejor jugador del mes de octubre tras haber conseguido unos números espectaculares. Todavía sigue sorprendido a muchos el hecho de que solo tiene 18 años.
Walter Tavares volvió a ver minutos como madridista tras dos partidos donde seguía intentando adaptarse al juego del equipo. Esta vez, se le vio mucho más suelto en el esquema de Laso. Facundo Campazzo, con una gran defensa sobre McCallum, permitía dar la ventaja en el marcador para los locales con un marcador de 19-12 al final del primer cuarto.
Anthony Randolph está apartado del equipo por una lesión de estrés en la base del tercer metatarsiano del pie derecho. Así lo confirmaba el parte médico proporcionado por el club el pasado miércoles. Pablo Laso tuvo que apañárselas para suplir su baja, y lo hizo dando la titularidad a Maciulis y Tavares.
El Real Madrid consiguió llevar a cabo un juego ofensivo muy efectivo con jugadas bien ejecutadas y trabajadas previamente. Rudy Fernández encendió la antorcha consiguiendo ocho de sus 11 puntos en el segundo cuarto.
No bajaron la guardia en defensa y consiguieron forzar numerosas pérdidas y malas jugadas de un Unicaja que se encontraba perdido en la pista. Alberto Díaz y McCallum consiguieron sacar la situación adelante, pero el Madrid metía la quinta para cerrar el cuarto con una cómoda ventaja de 13 puntos, 40-27.
En el tercer cuarto, el Real Madrid echó el telón y puso fin a un encuentro que se desigualó a partir de los primeros minutos de la segunda mitad. Consiguieron endosar a Unicaja un parcial de 7-0 para comenzar el periodo y no bajarían el ritmo ofensivo en los diez minutos restantes. Jaycee Carroll decidió sacar la metralleta a pasear para aportar más puntos a su equipo. Mientras tanto, la defensa merengue capitaneada por un intimidante Tavares, conseguía dejar a los malagueños con solo 11 puntos en todo el cuarto, 62-38.
El último cuarto solo sirvió para confirmar aún más la victoria del conjunto de Pablo Laso. Siguieron con el pie en el acelerador y controlando los tableros a su gusto para llegar a los finales 32 puntos de diferencia. El Real Madrid dejó atrás sus problemas tras una humillante derrota en el Buesa Arena.
