Los Sixers se posicionan: «Ser anti-Trump es como desayunar por la mañana»

Los jugadores de los Sixers están en contra del presidente Trump en su guerra contra la NFL

Los Sixers en contra de Trump. Gage Skidmore (CC)

El 45º presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, es un mandatario atípico, más preocupado en publicar Tweets que en dirigir su país. Controvertido y polémico a más no poder, ha criticado mediante las redes sociales a personalidades y organizaciones de todos los ámbitos. Desde Obama hasta Meryl Sreep pasando por muchos otros artistas, cantantes, famosos o presentadores de la televisión. Todo aquel que no le guste se expone a recibir criticas del «commander-in-chief» y peor aún si le criticas, como fue el caso del presentador del late show de la CBS, Stephen Colbert. Ataques y más ataques, a los latinos, a la CNN, a los Emmys…

Y desde antes de ser presidente de los Estados Unidos ya criticó a Colin Kaepernick, el primer jugador de la NFL en ponerse de rodillas al sonar el himno nacional en vez de ponerse en pie, como protesta por las formas en que los Estados Unidos trata a la gente negra.

Pese a que ninguna ley obliga a ponerse de pie al sonar el himno, Trump, en un mitin calificó de «hijos de puta» a los jugadores que se arrodillan al solan el himno. E instó a los dueños de los equipos de la NFL a despedir a los jugadores que lo hicieran.

¿La respuesta de la NFL? Simple. Este último fin de semana gran cantidad de jugadores han hincado la rodilla al sonar el himno. Incluso los propietarios de los equipos salieron al campo para arrodillarse, como fue el caso de Shahid Khan quien donó un millón de dolares a la campaña presidencial de Trump.

Y cómo no, todo esto a terminando llegando a la NBA. Stephen Curry aseguró en el Media Day de los Warriors en que pensaba en no asistir a la Casa Blanca, como cada año hace el ganador del anillo. Y Trump respondió con un tweet donde le retiraba la invitación a todo el equipo.

Y entonces apareció Lebron James para publicar otro tweet donde se podía leer: «Ir a la Casa Blanca era un gran honor hasta que tú apareciste.»

Ayer fue el media day de los Philadelphia 76ers y los jugadores fueron preguntados por esta situación que llena las portadas de los medios estadounidenses y alguno jugadores de la plantilla dejaron sus impresiones sobre el tema y sobre la libertad de expresión.

Uno de ellos fue el base Jerryd Bayless quien comentó:

«Las protestas son buenas. Creo que todo el mundo tiene el derecho de hacer lo que quiera pero necesitamos juntarnos y hacer sentir a Trump que lo que está haciendo está mal. No sé si es el momento apropiado para hacerlo pero con suerte desde ahora todo el mundo encontrará el modo de progresar y encontrar el camino que le haga ir en una dirección diferente.»

Justin Anderson, que llegó al equipo a través de un trade la temporada pasada también quiso hablar del asunto. El jugador nació en Virginia, y jugó también en la universidad de Virginia, estado donde se han visto múltiples violentas protestas por motivos raciales. Una de las más violentas fue la de Charlottesville, donde la propuesta de retirar una estatua de Robert E. Lee, general del bando confederado (a favor de la esclavitud) provocó una manifestación de un grupo de nazis y supremacistas blancos que al ver que había gente que protestaba en contra de su marcha embistieran con un coche asesinando a una persona e hiriendo a 19 más. Y la respuesta de Trump, fue criticar violencia de ambos bandos, algo muy criticado tanto por lo demócratas como por los republicanos (partido por el que Trump se presentó a las elecciones).

«La situación de Charlottesville golpeó en casa. Fue algo muy relevante en mi vida. Igual que la protesta que hemos visto últimamente, tenemos un grupo de chat y hemos estado mandando capturas de pantalla de cosas unos a otros. Tenemos 10 días hasta el primer partido de pretemporada, nosotros deberíamos mandar físicamente nuestro mensaje, aun no hemos decidido pero estamos todos de acuerdo en el vestuario sobre las cosas que están pasando y queremos hacer algo para arrojar una luz que intente promover la unidad.»

Por último, también J.J. Redick quiso dejar su granito de arena sobre la situación que viven en Estados Unidos con Donald Trump como presidente:

» Soy tan anti-Trump como se puede. Lo he sido desde las elecciones. Creo que ser anti-Trump, es ahora mismo como desayunar por la mañana. Es algo que haces durante el día. ¿Con qué frecuencia pasas un día y no has sido ofendido por este tío?»

Claramente gran parte de la sociedad estadounidense está en contra del presidente (de hecho perdió el voto popular contra Hillary Clinton) y él en vez de tratar unir un país cada día más dividido en dos mitades, continua actuando de forma que fomenta esa ruptura. Habrá que ver si al igual que con la NFL, Trump empieza una guerra contra la NBA también.