Kyrie Irving, nuevo artista en Boston

Tras traspasar a Isaiah Thomas, pieza clave del ataque de los Boston Celtics, muchos se preguntan cómo encajará Kyrie Irving en el esquema de Brad Stevens. El nuevo jugador de Boston deberá ajustarse a un sistema más complejo que aquel al que estaba acostumbrado en Cleveland. En cierto modo, el sistema también habrá de adaptarse inevitablemente a él. Irving funcionó a la perfección a las órdenes de Tyronn Lue, con quien tuvo libertad para jugar acorde a su estilo de juego.

El ataque de Stevens prima más el movimiento de balón y de los jugadores sin él. Mientras que los Celtics acabaron la temporada pasada como el segundo equipo de la liga con mejor ratio de asistencias, los Cleveland Cavaliers finalizaron en torno a la media. Es necesario entender qué tipo de jugador es Irving para comprender cómo afectará su llegada al juego del equipo.

Desde que era un novato en la liga, Kyrie se ha caracterizado por ser un jugador primordialmente ofensivo. Sus once partidos como universitario en Duke no fueron suficientes para que el público conociera por completo su juego. Sin embargo, su capacidad anotadora le sirvió para ser la primera elección del Draft de 2011. Jonathan Givony opinó esto de él en diciembre de 2010.

«Si existiera un freshman (jugador de primer año) jugando un baloncesto impecable ahora mismo, Kyrie Irving sería el merecedor de este descabellado título».

En su primer año, ya hacía cosas como esta. Su nuevo equipo lo sabe.

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LeBron James volvió a los Cavaliers tres años después. A Irving no se le pidió que ejerciera de playmaker al uso. Llegó más talento al equipo (Kevin Love) y los Cavaliers se convirtieron inmediatamente en candidatos al título. Para entonces, Kyrie ya se había convertido en un jugador parecido al que vemos hoy, pero no aún en su versión final. Tras llegar a tres finales seguidas y ser clave en la consecución del primer anillo de la historia de Cleveland, Irving llega a los Celtics. Analizaremos, pues, qué jugador es y cuál puede llegar a ser bajo instrucciones de Stevens.

La magia de los aclarados

Kyrie es un jugador predominantemente ofensivo. Su envidiable manejo de balón resulta prácticamente imparable para la defensa rival, cuya única opción realista suele ser quedarse a mirar cómo llega hasta la canasta. Las situaciones de aclarados -o isolation– son aquellas en las que Irving se siente más cómodo. El base aleja a sus compañeros, se empareja en uno contra uno ante su adversario y trata de minimizar las posibilidades de que la defensa ayude. Debe estar dispuesto a pasar al jugador abierto si se da el caso. Gordon Hayward amplificará este efecto, pues contribuirá al espaciado del equipo y castigará al oponente si está solo.

Cabe mencionar que el aclarado es una de las jugadas ofensivas menos eficientes desde un punto de vista analítico. Sin embargo, Kyrie los domina, siendo el jugador que más puntos por aclarado (1.12) promedia de entre aquellos que intentan más de tres por partido. A la vez, no es el jugador que más recurrió al isolation esta última temporada. Sus 4.4 intentos por partido estuvieron empatados con Carmelo Anthony. Sólo vimos más en los espectáculos ofensivos de Russell Westbrook y James Harden.

Estas jugadas son individualistas y paran el ataque del equipo. Sin embargo, son unas de las más apreciadas en cuanto llegan los Playoffs. Thomas utilizó aclarados en un 9% de sus posesiones; Irving, en un 21%. Hayward tendrá menos presión. Esto se debe a que un aclarado bien hecho es muy difícil de defender. Son letales para las defensas que cambian en bloqueo y continuación. Además, resultan excelentes para situaciones en las que el equipo necesita una canasta desesperadamente o el reloj de tiro se agota. Hace falta tener sangre fría para destacar en esos momentos; a Irving le sobra.

Constante amenaza desde fuera

La mitad de los triples de Irving son asistidos. Su eficacia en acciones de catch-and-shoot es excelente, manteniendo unos promedios cerca del 48% en el último año. Sus números bajan comprensiblemente cuando debe crear su propio tiro desde lejos. No obstante, sólo Chris Paul hace más con menos en estas situaciones. Las métricas favorecen también a CJ McCollum en effective field goal percentage.

Sus capacidades off-ball están infravaloradas, aunque no son de élite. Puede cortar y salir de bloqueos sin problema. Kyrie posee además ese gen clutch que le permite cambiar un partido por su cuenta. A lo largo de las prórrogas de su carrera, promedia 7 puntos y 97.7% en tiros libres. Y, bueno, hay vídeos que hablan por sí solos.

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Quizás Al Horford no sea el modelo ideal de pívot para bases como Chris Paul, pero le viene como anillo al dedo a Kyrie. El pick-and-roll se antoja letal. Además, el dominicano es un gran pasador con buena visión de juego. Irving se beneficiará de la voluntad de Horford de buscar al hombre abierto.

Debe tenerse en cuenta la presencia de LeBron en Cleveland y cómo afectó a los números de Irving. James es uno de los mejores pasadores de la historia, además de un jugador conocido, entre mil otras razones, por mejorar a sus compañeros. El movimiento fluido de balón del ataque de Stevens generará buenos tiros para Irving y hará que él genere buenos tiros para sus compañeros. Y es aquí donde entra la evaluación sobre si Kyrie funcionará como creador de juego.

Irving no es un playmaker típico

Isaiah Thomas tuvo mejores porcentajes de asistencia (número de tiros de campo asistidos por el jugador entre los totales del equipo) que él, quizás en parte debido a su rol mayor. No hay una diferencia muy tangible entre ambos jugadores como asistentes. Ninguno de los dos destaca por ello. Sin embargo, es de esperar que sus números suban con el balón más en sus manos y tiradores alrededor de él. Se entiende que la petición de traspaso de Irving implica búsqueda de un papel más importante. Debería estar dispuesto a pasar más. De todos modos, su porcentaje de uso o usage rate fue mayor que el de LeBron, aunque menor que el de Thomas.

5.9 asistencias por partido para Thomas, 5.8 para Irving. Si esto no deja claro el diminuto margen que existe entre ambos jugadores en esta faceta del juego, el número de asistencias potenciales lo hará. Las asistencias potenciales contabilizan los pases de un jugador a sus compañeros que figurarían como asistencias si el tiro inmediato hubiera ido dentro. ¿Cuáles son los números? Isaiah promedió 11.4. Kyrie, 11.3. Además de Harden y Westbrook, John Wall se encuentra en el top-3 de la estadística.

En sus tres primeros años en Cleveland, sus porcentajes de asistencia estaban cómodamente por encima del 30%. La vuelta de LeBron hizo que se desplumaran. La temporada 2015-16, la de la consecución del anillo, fue en la que Irving repartió menos asistencias en su carrera (4.7). Quizás esto resalte la importancia que consigue tener en el juego aun sin ser un pasador. Irving no es el tipo de jugador que haga mejor a sus compañeros por un gran margen, pero sus individualidades pueden llevar a un equipo al siguiente nivel.

 

¿Depende su éxito de LeBron James?

Quienes contesten afirmativamente se apoyarán en los números de Kyrie en sus primeros años para quitar valor a su impacto en el juego. Si bien es cierto que Cleveland apenas ganó cuando LeBron estaba en Miami, Irving era un jugador muy joven y con poca experiencia. Sería injusto utilizar lo que hizo un jugador con 21 años para juzgar su juego con veinticinco.

Obviamente, las métricas avanzadas favorecen a LeBron: los Cavaliers tienen una diferencia de 16.2 puntos de net rating cuando el de Akron se sienta. También es necesario mencionar que la diferencia sigue siendo notable -7.2- cuando Irving se sienta. Es lógico que un equipo sea mejor cuando está LeBron James en pista. No debería hacer falta decirlo.

Además, no tiene mucho sentido decir que fracasará o triunfará sin LeBron antes de haberle visto jugar en su nueva etapa. Irving busca su propio proyecto y se siente capaz de liderar un equipo. La plantilla que tendrá alrededor en Boston será infinitamente superior a la que tuvo en sus primeros años en Ohio.

En defensa, peor que la media y mejor que Thomas

Es un mal defensor. Tiene malos hábitos. Nunca se ha caracterizado por ser capaz de secar a sus adversarios. Gran parte del problema es de esfuerzo, ya que las herramientas las tiene. Irving mide 16 centímetros más que Thomas y tiene una envergadura de 193. Es mejor defensor simplemente basándonos en esos números. La mayoría de las veces, correr y luchar en bloqueos no es suficiente para Thomas, cuyos brazos cortos no suelen afectar la trayectoria del tiro rival.

Varios aficionados piensan que Stevens logrará hacer que defienda, pero comportamientos en la cancha como el de Irving son difíciles de cambiar. Cuando se esmera, puede llegar a ser efectivo atrás. Desgraciadamente, no son muchas las ocasiones. Podemos ver en este vídeo cómo intercepta el pase de Stephen Curry y consigue el dos más uno.

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La falta de esfuerzo no es sólo aplicable a Irving. Los Cavaliers tuvieron el vigésimo primer defensive rating de la liga, sorprendente para un participante en las Finales.

Fue el ataque lo que les llevó lejos. Hay quienes opinan que un buen ataque siempre se impondrá a una buena defensa. Es cierto que quienes dominan el deporte son los que encestan la pelota. La defensa también es importante, claro está. No obstante, ni defensores tan contrastados como Avery Bradley pueden parar a fuerzas ofensivas como Irving. Quizás la defensa de los Celtics haya salido reforzada en una hipotética serie contra Cleveland simplemente por no tener que enfrentarse al poderío en ataque del australiano.

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Las diferencias entre Stevens y Lue

Decir que el ataque de Stevens es más complejo que el de Tyronn Lue no es un elogio al primero ni una crítica al segundo. El esquema ofensivo de los Cavaliers tiene menos acciones sin balón que el de los Celtics, pero les ha sido efectivo igualmente. Stevens ha implementado en su equipo un sistema de motion offense en el que los jugadores reaccionan en base a la situación del encuentro. Este artículo de Andrés Villar lo explica a la perfección.

No es que los Cavaliers no utilicen bloqueos o cortes en acciones secundarias. Simplemente lo hacen menos que los Celtics. Un plan que funcionó ante Boston este año fue utilizar un pick-and-roll hasta conseguir un emparejamiento favorable y buscar el aclarado. Este año, el conjunto de Stevens tiene más versatilidad y aleros que puedan cambiar sin que la defensa se resienta. Cleveland utilizó esta estrategia en las Finales, aunque tomaron la decisión de atacar emparejamientos dudosos. En este vídeo, vemos como Irving busca activamente el uno contra uno ante… Kevin Durant. Estrategia colectiva poco comprensible.

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Si Irving sigue utilizando los aclarados con la frecuencia de años anteriores, el ataque de los Celtics no será tan fluido. No sabemos qué parte de su individualidad se debe a su forma de jugar y cuál viene obligada por el esquema. Es difícil descifrar la integración de los nuevos jugadores de la plantilla. Dependerá de si Stevens adapta su método a su plantilla o si son los jugadores los que deben amoldarse. Probablemente, será una mezcla de ambas.

El futuro es suyo

Irving es un All-Star y un campeón de la liga con 25 años. Él y Thomas son ahora jugadores parejos, pero no deberían serlo en unos años. No sólo entra en juego la lesión de Thomas, sino que la progresión de Kyrie debería ser ascendente. A pesar de que es imposible averiguar cómo irá su carrera en el futuro, es fácil imaginar. El potencial existe y está a la espera de ser explotado más aún.

En definitiva, Irving es un jugador complejo, joven y moldeable. No veremos al mismo Kyrie de Cleveland en el TD Garden. Observaremos una versión similar. Le llevará un tiempo adaptarse del todo al juego del equipo. Tendrá aficionados y detractores, pero está claro que Kyrie Irving es el jugador con más talento que han tenido los Boston Celtics desde que decidieron iniciar su reconstrucción particular.