Dwyane Wade, cerca de abandonar Chicago
Podría acordar un amistoso 'buyout' con los Bulls
La reconstrucción parece haber tachado de la lista su última tarea: verter más gotas del elixir de la eterna juventud sobre el elenco. ¿Esto que supone? La marcha de la figura más vetusta de la plantilla, Dwyane Wade, que en enero reunirá 36 velas en su tarta.
Tal cual salió a la luz esta noticia desde portales informativos, que en absoluto han pillado desapercibidos a los más prudentes fans. Tarde o temprano, el amargo y frugal paso de Wade por su hogar, se desvanecería como un soplo de aire de la propia Chicago. ESPN, siempre en el ojo del huracán del mercado filtraba la siguiente cita:
«Dwyane Wade no cuenta como parte del futuro de la asociación y se espera que se llegue a un acuerdo de rescisión de contrato en los próximos meses.»
‘En los próximos meses’, ¿lógico, no? Y es que con el desamparo de Dwyane Wade en la Free Agency; «24 millones de razones» como lo tildó el propio Flash, pueden convencer a otro dueño de dichas cantidades, más joven, de sembrar su maña en la nueva tierra fértil custodiada por Gar Forman y John Paxson.
Por lo tanto, ¿qué será de Dwyane? Como buenos ‘parientes’ del legendario guard, nos preocuparemos porque su felicidad rebose allá por donde campen sus pulcros fade-aways. No obstante, lo mejor era cortar por lo sano, y que busque salir por la puerta grande cuando decida colgar las botas.
Wade, ¿Dónde iría?
¿Cleveland? A priori el gran favorito en hacerse con sus servicios. Wade todavía puede ser competitivo al más alto nivel en un lugar dónde pueda pelear por el campeonato. En Cleveland Cavaliers se encontraría con un equipo aspirante a todo y uno de los reencuentros más esperados, volviendo a jugar junto a LeBron James.
¿Miami? Su regreso a la que ha sido su casa en la NBA suele estar en boca de la prensa. Además ahora los Heat podrían competir muy bien en el Este la próxima temporada, más todavía con la vuelta de ‘Flash’.
Lo desconocemos, pero su destino ha dado la estocada definitiva a la directiva para dejarlo marchar. ¡Gracias, Don Dwyane Wade!
