El juego de Norman Powell a examen

Nadie hubiese esperado hace una temporada que Norman Powell hubiese alcanzado el nivel que tiene ahora. Sí, el equipo gira en torno a DeMar DeRozan y Kyle Lowry (si siguiese, sería así), pero Norman Powell ha demostrado estar capacitado para ser uno de los ingredientes principales de la plantilla de los Toronto Raptors. Un escalón por debajo de los antes mencionados encontramos a Powell y a Serge Ibaka, formando un cuarteto que sin llegar a ser top, es bastante interesante.

Los números de Powell tampoco son una gran maravilla, pero su valor en la plantilla y su incalculable proyección futura le hacen subir como la espuma. Y si se ha generado un gran debate, es por su eliminatoria contra los Bucks. Su actuación en el quinto partido con 8 de 11 en tiros de campo será recordada y sirvió para decantar la eliminatoria a favor de los de Toronto.

Lo bueno de Norman Powell

• La eliminatoria contra los Milwaukee Bucks, puede llegar a sonar repetitivo, pero es que fue realmente excepcional, se entregó al equipo y respondió con creces.
• Su rol en el equipo cambió: pasó de ser un jugador de rotación a un jugador con importancia. Mientras pasaba más tiempo en el banquillo que en la pista, Powell respondió en silencio. Y, cuando le toco jugar fue capaz de desatascar partidos él solo. La fuerza y la intensidad con la que juega contagia, y se nota en ambos lados de la pista.
• Los resultados y las comparaciones con los compañeros. Los resultados favorecen a «Norm». Es cuestión de números y juego.

Lo malo de Norman Powell

• Todavía no se ha convertido en la estrella que aspira a ser. No es malo, solo es cuestión de tiempo.
• Quizás su rapidez lateral en defensa no es del todo óptima y debe mejorar en la toma de decisiones.
• Si los Raptors dan un salto de calidad respecto a temporada pasada, podría depender de la evolución de este jugador.  Si juega el 80% de los partidos como contra los Bucks, no habrá duda. Toronto estará ahí.