Un Olympiakos-Real Madrid siempre es un partido tanto igualado como divertido e intenso. Los griegos, de la mano de Vassilis Spanoulis, recibían a un Real Madrid con el chute de ganar un clásico por una gran diferencia, tanto en el marcador como en sensaciones. En resumen, el líder frente a uno de los campos más difíciles de Europa, ante el segundo mejor equipo defensivo.
El poderío físico del equipo griego se notó al principio del partido, con un gran rendimiento ofensivo también. Para los blancos, Jonas Maciulis tiró del carro para mantener el partido igualado. Milutinov, en un clínic de cómo rebotear ofensivamente, fue la figura más destacada del equipo de casa. Un total de 8 rebotes ofensivos del equipo griego fueron la clave para que los locales se fueran al final del primer cuarto ganando de uno tras un triple sobre la bocina de Sergio Llull, 20-19 en el marcador.
La inmersión de Anthony Randolph en el partido, sin embargo, le cambió la cara notablemente al Real Madrid en el segundo periodo. Tapones antológicos, anotación tras rebote ofensivo… Él solo contrarrestó el poderío físico del Olympiakos. En definitiva, este segundo cuarto fue un intercambio de canastas que puso en el marcador un empate a 37 entre los dos equipos y todo por decidir.
En el tercer cuarto, el Olympiakos comenzó como un tiro… nunca mejor dicho. Dos triples, uno de Papanikolaou y otro de Spanoulis, abrieron la lata. Aun así, siguió siendo un partido defensivo, no ofensivo. Olympiakos dominó hasta que entró Sergio Llull con uno de los vendavales ofensivos a los que nos tiene acostumbrados y logró poner al Real Madrid por delante.
En el último periodo, el Real Madrid salió muy concentrado en defender la ventaja y la verdad es que no les salió mal. Se encontró con un Olympiakos muy inefectivo en ataque, pero que no se descolgaba del partido en ningún momento. Los griegos comenzaron a remontar a falta de tres minutos de juego comandados por Spanoulis y llegaron a ponerse incluso a tres puntos, pero el Real Madrid consiguió defender la ventaja y acabó el partido ganando por 73-79 a uno de los mejores equipos de la competición.
El partido fue de Anthony Randolph
Para el Real Madrid, el mejor fue Anthony Randolph con 21 puntos, 5 rebotes, 4 tapones y 8/10 en tiros de campo, 1/2 en triples y 4/4 en tiros libres para acabar con 30 de valoración. Sergio Llull, esta vez en un segundo plano, acabó en 21 puntos, 5 asistencias y 24 de valoración.
Por los locales, el que mejor jugó fue Nikola Milutinov, que estableció su career high de anotación con 18 puntos, aparte de 4 rebotes (todos ofensivos) y 24 de valoración. Su escudero fue Kostas Papanikolau con 11 puntos, 6 rebotes y 17 de valoración.
