Los Detroit Pistons, mejor que nunca dentro y fuera de la pista
El equipo por fin encuentra su sitio
No es una incógnita que la Motown no ha tenido la temporada soñada por el momento. Si bien venían de clasificarse por primera vez en los PlayOffs después de 7 años y no se veían más que claros de mejora para estos jóvenes jugadores, una desafortunada lesión de Jackson cambió por completo el rumbo del equipo. Y hasta ahora, más de 60 partidos después, los Detroit Pistons parecen por fin dispuestos a ir a por todas. Ahora ya sí que podemos ver defensas incisivas, robos interceptando pases y ataques con pies y cabeza, con todo el equipo en movimiento.
Pues bien, esta bonita situación vivió una dura prueba contra los Cavaliers hace unos días, cuando el equipo de Ohio tenía que visitar por última vez el Palace, a no ser que se crucen con Detroit en PlayOffs. Cleveland empezó muy fuerte, y es en estos momentos cuando los líderes deben aparecer. Van Gundy dijo lo siguiente:
«Fue en ese momento, cuando íbamos 27-12, cuando Morris me puso la mano en el hombro y me dijo «Yo me ocupo». Entonces habló con los jugadores, y les dijo que si no querían competir se podían marchar para el vestuario».
«De hecho funcionó muy bien. Remontamos el segundo cuarto y nos fuimos al descanso por delante en el marcador«.
Tobias Harris habló también sobre el partido y sobre el discurso de Morris:
«Fue una gran victoria para nosotros. Por la forma en la que batallamos, el esfuerzo colectivo y la lucha durante toda la noche. Jugamos un partido muy sólido y fue muy gratificante estar en ese vestuario«.
«El discurso de Morris nos ayudó mucho, pero dijo muchas palabrotas. Creo que tendrá que acompañarme el domingo a misa«.
Van Gundy terminó diciendo lo siguiente, que seguro que hará que los aficionados de los Detroit Pistons esbocemos una sonrisa:
«Es probablemente el vestuario más feliz en lo que llevamos de temporada. No solo por ganar a Cleveland, si no por la forma en la que lo hicimos«.
