Los Blazers de Lillard y McCollum ponen al descubierto las irregularidades de Lakers

Victoria de Portland Trail Blazers, en el Staples Center más púrpura, ante unos Los Angeles Lakers que por décimo partido consecutivo volvían a perder ante el equipo liderado por el colosal Damien Lillard. Encuentro marcado por las maldiciones en forma de rachas negativas, pero también por el excelso trabajo defensivo de los visitantes en la segunda mitad.

Llegaban los Lakers en unos de sus mejores momentos de la temporada, con dos victorias consecutivas, para enfrentarse a uno de sus cocos, unos Blazers que les habían ganado 9 veces consecutivas. Para los de Walton era un buen momento para intentar romper esta racha, ante un equipo de pleno derecho de playoffs, pero con dudas, que les habían tomado la medida en los últimos tiempos.

Con la euforia púrpura a pleno rendimiento, los de Walton trabajaron a buen nivel en la primera mitad e incluso se llevaron la primera mitad con una microscópica ventaja, un +2, que dejaba el partido en un puño. Quizás el mismo puño que demostrarían los Blazers, en una segunda mitad donde estarían mucho mas agresivos defensivamente, los locales no supieron estar a la altura, y el partido se fue decantando para los visitantes con la misma velocidad del rayo, en forma de irremediable derrota.

En todo lo que significó la segunda mitad, un despropósito púrpura, y un excelso juego de los Blazers, debemos destacar no solo su ultradefensa demostrada, sino a dos jugadores muy acertados en la noche de hoy, Damian Lillard y CJ McCollum.

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— Trail Blazers (@trailblazers) January 11, 2017

En lo numérico, Damian Lillard fue el jugador que lo absorbió todo, con sus 20 puntos, 8 rebotes y 6 asistencias, sería el auténtico líder de un equipo que en él tiene su faro de guía. Pero en la personalidad anotadora de McCollum, encontrarían los Blazers el auténtico destructor del partido. El escolta de los visitantes se iría a los 25 puntos, 4 asistencias, realmente efectivo en sus tiros de campo, convirtiéndose en un auténtico baluarte para la sobredosis final de buen juego en la segunda mitad.

En el lado de la derrota, el de púrpura y oro, los Lakers se mantuvieron activos en una buena primera mitad, pero descontrolaron sus efectivos, y su buen juego, en una segunda mitad donde se vieron desbordados por las bondades ofensivas y defensivas del rival. El único que se pudo salvar de la quema, un Luol Deng que siempre lo intentó con intensidad. Deng se iría a los 14 puntos y 6 rebotes, 4 de ellos ofensivos.

En conclusión, los de Portland se agarran a Playoffs en esa lucha encarnizada por mantenerse, por el momento, en una octava plaza que sabe a bastante poco, cuando las aspiraciones de principio de temporada eran muy superiores. Los Lakers pierden, y lo vuelven hacer con su archienemigo, unos Blazers que les ganan por décima vez consecutiva, y prometen hacerlo por 11º vez si los de LA no consiguen convertir lo irregular de su juego en la regularidad prometida. Un oasis púrpura que hoy por hoy sigue siendo el desierto mas inmenso de toda California. ¡¡¡Veremos!!!!