Los Brooklyn Nets buscan respuestas tras las últimas derrotas
Miembros del equipo lo corroboraron
Los Brooklyn Nets han seguido su línea esperada en este corto tiempo que llevamos transcurrido de la regular season. Pese a que comenzaron jugando un gran baloncesto, esta forma se ha diluido a medida que corría la temporada, viéndose afectada por la lesión de Jeremy Lin y porque tienen uno de los peores calendarios de la liga. Aun así, su entrenador, directiva y jugadores no se rinden.
Las dos últimas derrotas del equipo, frente a los Golden State Warriors y Cleveland Cavaliers han sido reveladoras. El conjunto neoyorquino ha cometido 45 pérdidas entre ambos encuentros, que han significado 54 puntos de contraataque para sus contrincantes. Esta es solo una de las claves del mal juego de la franquicia. Van últimos en la liga en control del balón y en defensa, y su ataque, como Kenny Atkinson comenta, no mejora, dado que su tiro de tres tampoco lo hace y es base fundamental de la faceta ofensiva. Tras el partido contra Cleveland, Jeremy Lin comentó lo siguiente:
«Una derrota es una derrota. No voy a darle muchas vueltas. Cada equipo hará esto durante el curso de una temporada de 82 partidos. Solo tienes que olvidarte de ella. Esto es de lo que Kenny estaba hablando. No es satisfactorio, pero hay que deshacerte de ella, tomar un tiempo dejar que nuestras mentes y cuerpos sanen y prepararnos para el partido después de Navidad».
Los Nets perdieron el partido de 20, pero fueron perdiendo de 45. Atkinson destacó el esfuerzo de los jugadores para maquillar la ventaja, aunque fuese en los minutos de la basura. Las cinco derrotas consecutivas no van a desmoralizar a la franquicia neoyorquina, de eso está seguro Kenny Atkinson:
«Tenemos un gran grupo de chicos. Esos son los chicos que Sean trajo y nosotros trajimos. Ellos solo siguen trabajando. Si siguen juntos, van a seguir mejorando«.
Ahora, los Brooklyn Nets deben seguir con su filosofía y no mirar atrás. Trabajar, trabajar y seguir trabajando. Ya que de calidad y talento van justos, hay que compensar esas faltas con trabajo duro, y esa es la nueva cultura que Brooklyn está tratando de imponer. Si su entrenador y GM continúan a este ritmo, la reconstrucción se hará mucho más amena.
