Jaylen Brown, análisis en profundidad

El rookie de los Boston Celtics ha dejado grandes sensaciones

Jaylen Brown, jugador de los Boston Celtics.
Jaylen Brown, jugador de los Boston Celtics.

Mucho se habló de lo que podían hacer los Celtics con el tercer pick del pasado Draft. Ante la ausencia de eventuales traspasos y con los intentos de robo de los Bulls y los Wolves, la Gerencia de Boston prefirió hacer uso de la Selección y escoger al atlético alero de 19 años, Jaylen Brown.

Las estadísticas son, en muchos casos, una de las más grandes mentiras de la NBA. Y no me refiero precisamente a los 20.7 puntos de promedio de Andrew Wiggins la última temporada, muchos de ellos en partidos definidos y no exactamente a favor de sus Wolves. A lo que hacía referencia, es que hay muchos jugadores que pueden aportar mucho más (o menos, disculpa Andrew) que lo que sus números indican.

Sin embargo, para empezar este repaso de lo que fueron los siete partidos de pre-temporada de Jaylen Brown en los Boston Celtics, empecemos con una fría mirada a sus números:

Estadísticas NBA.com
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A simple vista, nada mal para un novato. Un porcentaje de campo decente, flojo desde la línea de tres puntos, como se sabía desde los primeros scouteos pre-draft y demás. Sin embargo, como decía, muchos de estos números no hacen justicia con lo que pudimos ver de Jaylen en la pretemporada.

Virtudes de Jaylen Brown

Lo primero que debemos aclarar, aunque todos lo hemos visto, es que Brown es el auténtico highlight reel player, un chico que con sus monstruosas capacidades atléticas ha dejado al menos una jugada para repetir una y otra vez, literalmente, en todos los partidos que ha jugado con los Celtics en esta pre-temporada.

Para conseguir dichas vibrantes y emocionantes jugadas no solo hace uso de su sobrenatural salto, una de sus principales virtudes es que corta muy bien al aro, marcando el pase a sus compañeros para fabricarse sus canastas cerca del aro. Cabe aclarar que no solo lo hace en las salidas rápidas, cuando las defensas no están establecidas y explota el desorden para beneficiarse, sino que en ofensivas estacionadas también ha mostrado una buena lectura para llegar a la canasta.

En este caso, aprovecha que con la doble marca sobre Gerald Green en el otro lado de la cancha, toda la defensa de Brooklyn se cierra del lado de la ayuda y cuando su defensor está desubicado, corta directo al aro para taladrar la pelota.

En esta jugada, con el rebote ofensivo que gana Bradley y la desconcentración de Rondae Hollis Jefferson en la marca sobre Brown, pasa por detrás de toda la defensa y aprovecha el gran pase de Smart (que lo entiende todo)para completar el Alley oop.

Por otra parte, otra de las grandes virtudes de Jaylen para fabricarse sus puntos se produce cuando recibe abierto luego de la descarga de un compañero. El defensor llega a cerrar el eventual tiro y Brown utiliza el momento con el que llega su rival para dejarlo mal colocado y atacar el aro. Una situación que, además, podría capitalizar mucho jugando de 4 abierto, como lo hizo durante algunos pasajes de la postemporada y que podría brindar una interesante solución a Brad Stevens.

En el que fue su primer gran highlight en la pretemporada, se aprecia exactamente lo mencionado, el cierre de un Richaun Holmes mucho más lento que el novato le da la oportunidad perfecta para ir directamente al aro, dejándolo en el camino fácilmente.

Ahora, mucho más cerca del aro y con un Kuzminskas que llega al cierre demasiado tarde, Brown solo tiene que cambiar la dirección y en menos de lo que el lituano esperaba, ya lo veía volar por los cielos del TD Garden.

Si esto era en ataque estacionado, pues el contragolpe es algo que se le da muy bien a Brown, sea fabricándose su propia salida rápida luego de una anticipación defensiva, como en este partido contra los Hornets:

O, sea aprovechando el desorden de una defensa en retroceso que sin establecerse, es el blanco favorito para el depredador que usa la número siete de los Orgullosos Verdes, como en este buen pase que le pone Demetrius Jackson para que solo tenga que depositarla en la canasta de los Nets.

Otra herramienta que tiene el novato –y que, dicho sea de paso, es mi favorito- es una perfecta mecánica para ejecutar el fade away tras el giro en el poste bajo, como lo haría un reciente jugador retirado que prefiero no mencionar por normas internas de El Despacho.

Estos, que fueron sus primeros puntos en la pretemporada, son un manual del ataque del poste bajo, cortando al bloque, ganando la posición a su defensa y lo que hace una vez recibe la pelota, es poesía.

Aunque mucho más aparatosa y casi sorprendente por la velocidad de su ejecución, este giro sobre Porzingis es técnicamente maravilloso y justo como el anterior, no toca nada más que la red.

Por demás, en su juego ofensivo cabe resaltar lo suelto que se mostró desde el primer partido, nunca tuvo miedo de hacer su juego, atacando al aro sin cesar (aunque incurriera en muchas pérdidas de balón) y dejando que fluyeran las acciones en el parqué sin forzar situaciones determinadas. Claro ejemplo de esto fue el cierre del partido del 13 de octubre contra los Nets en Brooklyn, con una apretada victoria que se selló con un hermoso pase por detrás de la espalda de Brown para la clavada de Mickey. Cuando podía ir a destrozar el aro, prefirió tomar la decisión indicada:

Y en la siguiente acción, podemos observar su decidida intención de ir al aro contra un buen defensor como Kuzminskas que de nuevo, sufrió al ex Golden Bear.

Cerrando el apartado de virtudes, me llamó de gran manera su agresiva y determinada forma de buscar el rebote en ataque, aunque puede mejorar su box-out en el costado defensivo, sus capacidades atléticas le permiten ser una buena ayuda para los Celtics en un apartado que vaya si necesitan mejorar:

En el primer caso, le gana casi que por viveza a Hollis Thompson con un extraordinario salto y gana una segunda oportunidad para los verdes mientras que en el segundo caso, está bien posicionado para el eventual fallo de Rozier y consigue la canasta tras el rebote.

Defensivamente, Brown tiene la intensidad (permitida en gran parte por sus atributos físicos) de muchos de sus compañeros y eso de por sí, es genial, sin embargo debe trabajar en su concentración tanto en la defensa on como off ball. Aún así, va a ser muy útil para Stevens por su polivalencia en este costado, puede marcar perfectamente a los aleros en alineaciones grandes y a los ala-pivots cuando los rivales vayan small. Aunque tuvo algunos problemas al inicio, el rookie se las apañó para medirse con Frank Kaminsky de los Charlotte Hornets y a base de puro posicionamiento, detener la embestida de «The Tank. 

Teniendo en cuenta que en su estadía en la Universidad de California nunca se midió con los ala-pivots rivales, es algo que tiene mucho tiempo para mejorar pero que fácilmente puede incorporar a su arsenal defensivo.

Aspectos a mejorar

En cuanto a su juego ofensivo, hay dos cosas que debe mejorar. La primera, más preocupante, es su mala mecánica en el tiro de tres puntos. Se demora bastante para armar su tiro -aunque ha mejorado la mecánica que tenía en California- y es realmente inconsistente, tiene muy poco acierto al aro y eso le va a costar mucho cuando en el transcurso de la temporada, los rivales empiecen a dejarle abierto para que tome los tiros.

Su 29% en la temporada, como el que traía de la Universidad, es preocupante para una NBA cada día más exterior. Además, es poco confiable para crear su tiro, generalmente los toma muy marcado o sin entender la acción que está pasando, algo que para el read and react de Stevens, es fundamental.

Otro error que ya venía mostrando desde sus días como freshman el año pasado, es su incapacidad de crear juego y muchas veces, en su frenesí, incurre en pérdidas de balón ya sea regalando la pelota en un mal pase o con pasos al recibir el balón -moviendo el pie de pivot- que de por sí, son muy de rookie y que eventualmente, deben ir desapareciendo:

Finalmente, en el partido contra los Knicks, tuvo la gran experiencia de marcar a uno de los mejores anotadores del juego, Carmelo Anthony. El resultado fue, como en tantas otras ocasiones, un almuerzo del 7 de New York sobre el novato. Jaylen mostró su inexperiencia, cayendo ante un par de fintas o cediendo el espacio a Melo, cosa que también debe corregir para los futuros enfrentamientos contra las superestrellas de la liga.

Así pues, Jaylen Brown demostró que puede aportar cosas desde el primer día para los Celtics y que no está tan verde como muchos creíamos, debe corregir bastantes cosas en su juego pero en especial por sus condiciones va a ser muy tenido en cuenta por Brad Stevens a lo largo de la temporada. La pretemporada, fue una buena señal de lo que puede dar y si se convierte en un adicto al trabajo como Marcus Smart, Jae Crowder y compañía, los Celtics pueden haber seleccionado un gran jugador.