Caras viejas y nuevas ya han empezado a trabajar en la Fonteta en vista de la temporada 2016-17, en la cual el Valencia Basket intentará repetir el gran arranque del año pasado y, por supuesto, mejorar en la recta final. El objetivo de las últimas temporadas es siempre el mismo: intentar dar ese definitivo salto de calidad que aún queda para convertir a un gran equipo en un conjunto ganador.
Para ello han trabajado intensamente el Director Deportivo Chechu Mulero y sus colaboradores, para intentar construir una plantilla siempre más competitiva, que permita a Valencia Basket luchar de tú a tú frente a Real Madrid y Barcelona (y también Baskonia, Unicaja, Gran Canaria…) a nivel nacional y seguir siendo un referente en Eurocup, pero sin alejarse de la filosofía de la “Cultura del Esfuerzo”. Este ADN luchador ha regalado muchas satisfacciones a la afición que llena siempre una Fuente de San Luis que se está quedando pequeña para contener tanta pasión hacia el baloncesto.
La plantilla:
Actualmente la plantilla taronja cuenta con 13 jugadores, cinco de los cuales nacionales:
- Bases: Sam Van Rossom, Guillem Vives, Antoine Diot
- Escoltas: Rafa Martínez, Joan Sastre
- Aleros: Fernando San Emeterio, Romain Sato, Vladimir Janković
- Ala-pívots: Luke Sikma, Will Thomas, Pierre Oriola
- Cénters: Bojan Dubljevic, John Bryant
Acabaron contrato y no renovaron Jón Stefánsson, Vladimir Lučić, John Shurna, Jordi Trias y Justin Hamilton; sus plazas fueron ocupadas respectivamente por Joan Sastre, Vladimir Janković, Will Thomas, Pierre Oriola y John Bryant.
La última incorporación en casa taronja fue dentro del cuerpo técnico, con un fichaje de absoluto valor que dice mucho acerca de las ambiciones del conjunto de la capital del Turia. Es noticia de hace un par de días que Jaume Ponsarnau será el nuevo segundo entrenador del Valencia Basket. Ponsarnau entrenó en ACB en Manresa y en el Gipuzkoa Basket, también cubrió varios roles como entrenador ayudante en las selecciones españolas de varias categorías, último encargo entre todos fue el de segundo entrenador de Sergio Scariolo en la selección que acabó colgándose el bronce olímpico en Río de Janeiro.
UN TROZO DEL BRONCE VIENE A VALENCIA
Jaume Ponsarnau se incorpora como entrenador ayudantehttps://t.co/XruyjwgPlk pic.twitter.com/XmeTqZ8KUX
— Valencia Basket Club (@valenciabasket) August 22, 2016
Lo que llama la atención en la plantilla que tendrán a disposición Pedro Martínez y Jaume Ponsarnau es la extrema versatilidad de muchos jugadores, algo que empieza a ser común en el baloncesto moderno. Antoine Diot es el clásico combo-guard que puede jugar tanto de 1 como de 2; Joan Sastre y Fernando San Emeterio pueden ejercer tanto de aleros como de escoltas; Vlado Janković, Pierre Oriola y también Romain Sato pueden desempeñarse tanto de 3 como de 4 y Bojan Dubljevic podría ocupar la posición de 4 en situaciones puntuales.
Con respecto al año pasado la estructura de la plantilla no ha cambiado mucho, se han ido sustituyendo piezas con maestría, dando pasos adelante: Joan Sastre aporta juventud y frescura con respeto a Jón Stefánsson; Vladimir Janković es un Vlado Lučić más regular; Will Thomas es un ala-pívot más all-around que John Shurna, que además de anotación aporta rebote y presencia bajo aro. Pierre Oriola entra en la plaza dejada por Jordi Trias, con lo cual aporta juventud y ganas de mejorarse y meterse en juego. En el cuerpo técnico, Jaume Ponsarnau trae más experiencia respecto a su predecesor, Carles Duran. El hecho de haber mantenido la misma guía técnica y planificación del juego deberían de jugar a favor de Valencia Basket, dando continuidad al buen trabajo emprendido el año pasado.
La clave:
La verdadera incógnita y la clave de si el Valencia Basket 2016-17 estará a la altura o podrá ser incluso mejor que el del curso 2015-16 está bajo aro y se llama John Bryant. ¿Estará el gigantón americano trasplantado en Alemania durante las últimas 6 temporadas a la altura de Justin Hamilton? El siete pies que se marchó para la NBA dejó el listón muy alto. Durante la pasada campaña, Hamilton fue sin duda el mejor jugador del Valencia Basket, con un promedio de 14 puntos y 5.4 rebotes por partido, siendo dominante en la pintura.
John Bryant es un jugador diferente. Primero en el físico: el nuevo fichaje del Valencia Basket no llega a los siete pies, mide 2.11 m, pero tiene un físico imponente, ya que pesa 127 Kg, mientras que Hamilton pesa 118 Kg midiendo dos centímetros más. Por ese motivo Bryant suele jugar más cerca del aro y se abre menos, aunque cuando lo hace sus porcentajes de acierto desde la larga distancia son excelentes. Además, durante la última temporada ha mejorado en el aspecto de los tiros libres, que a menudo son el punto débil de pívots de semejante envergadura. Defensivamente hablando, su prestancia física le garantiza ganar fácilmente la posición y capturar constantemente muchos rebotes. Tras seis temporadas en Alemania, Bryant busca un nuevo desafío, tendrá de su lado los casi 9.000 de la Fonteta y tiene todas las papeletas para lograr triunfar.
La estrella:
Valencia Basket es un equipo que basa su éxito en el colectivo y todos y cada uno de los jugadores suelen tener su protagonismo; durante la temporada 2015-16 varios jugadores destacaron por sus acciones y valentía en la cancha: el capitán Rafa Martínez, el carismático Fernando San Emeterio, la joven perla pretendida por el Barça Guillem Vives, el fantasioso Antoine Diot (o como diría el bueno de Lalo Alzueta, “Le meneur de jeu”), el correoso Luke Sikma con su increíble trabajo defensivo en la pintura; pero si hay y tiene que haber una estrella, un hombre-franquicia en el Valencia Basket, este es y tiene que ser siempre Bojan Dubljevic. El interior montenegrino nacido en 1991 está a punto de empezar su quinta temporada como taronja, convirtiéndose en el símbolo del equipo. Su juventud, su físico, su dedicación, su efectividad y su simpatía le convierten en el “crack” del Valencia Basket, y tendrá que seguir demostrando todas sus buenas calidades para seguir soñando en grande con su equipo.
El Valencia Basket 2016-17 tiene todas las papeletas para subir el último escalón que le queda para consagrarse como un «grande» del baloncesto español y europeo. AMUNT!
