«NBA Draft 2016: La peor camada Siglo XXI»

No se veía tan poca calidad desde el draft 2000

Ben Simmons

Hay quien puede argumentar que quizás estoy sufriendo el «Síndrome El Padrino: Parte III» y quizás mi opinión sobre la camada de jugadores que va a llegar este verano próximo a la NBA esta fuertemente influida por lo visto en los dos años anteriores: ya saben, la tercera parte de «El Padrino» no es una mala película (entendiendo como mala «El Diario de Noa» o «Prometheus«, por poner dos ejemplos), pero la altísima calidad de las dos anteriores hacen que esta palidezca en comparación. No, la verdad es que no creo que me esté pasando esto, sino que el «NBA Draft 2016″  es simple y llanamente muy malo. Posiblemente el peor que haya visto la NBA desde el «NBA Draft 2000«.

Simmons no es el nuevo LeBron ni Brandon Ingram el nuevo Kevin Durant

Todos los años pasa lo mismo. Esa multimillonaria empresa que ni siquiera paga a sus jugadores conocida como NCAA tiene que llamar la atención del público no solo el mes de marzo, y ya desde prácticamente el mes de Septiembre empieza a hablar de un jugador como el Nuevo LeBron James (lo cuál no deja de resultar gracioso puesto que el de Akron sí que jugaba en pistas universitarias, pero con su equipo del instituto). Así, en los últimos años hemos visto a Nuevo LeBron Wiggins, a Nuevo LeBron Oladipo y este año en otoño ya todos estábamos cansados de oír hablar de Nuevo LeBron Simmons.

Generalmente, las noticias sobre el Nuevo LeBron suelen ser el gancho de atención sobre la NCAA durante todo le invierno, la diferencia es que este año – y he aquí la primera pista de que el draft no iba a ser gran cosa – ya en Enero todo el mundo empezaba a sospechar que nos estaban colando gato por liebre. Puede que el australiano tenga una visión de juego y un físico con cierto parecido al jugador franquicia de los Cavaliers, pero LeBron sería capaz de meter una pelota de ping-pong en una piscina mientras que pensar que Ben Simmons puede hacerlo es poco menos que un acto de fe. ¿Alero/Ala-pivot sin tiro no ya de larga sino tampoco de media distancia en la actual NBA? Que pase el siguiente.

Como el Nuevo LeBron se iba desinflando tanto cada semana que pasaba que parecía que difícilmente iba a llegar su hype hasta Febrero, se empezó a fabricar un nuevo artefacto: el Nuevo Durant. Este espécimen, de reciente implantación, vino a contrarrestar el poco interés que Simmons empezaba a desatar entre el aficionado medio de baloncesto. Además, le daba a este el poder de situarse por encima de los profanos y proclamar: ‘Simmons es un bluff que no está ni en la Final Four, el bueno-bueno de este draft es Brandon Ingram‘.

El de Ingram es un caso distinto al de Simmons. Simmons es una incertidumbre: un jugador con dos cualidades muy buenas (pase y físico) que no encajan demasiado con la posición en la que puede jugar en la NBA; como bien dijo un compañero de esta casa «es un Rajon Rondo de 2.08 metros». Yo no soy tan generoso, para mí es un Evan Turner alto y sin tiro de media distancia. Además, su mala cabeza a la hora de elegir universidad (pequeña y sin tradición ni un cuerpo técnico medianamente competente) hace que tampoco lo hayamos visto evolucionar. Se le puso como #4, no funcionó demasiado bien, y no se intentó nada nuevo con él. Por su parte, Ingram sí que es un jugador más NBA. Tiene una posición definida (alero) y características para jugar en ella (buen tiro de tres, potencial de desarrollar físico y rebotea bien). El problema es que está verde como una lechuga y solo ha destacado jugando para el mejor equipo en un año de escaso nivel. Iría un paso más allá, no ha destacado.

Para poner en relieve la comparación con Kevin Durant. Uno promedió 25.8 puntos y 11.1 rebotes (28.9 y 12.5 en su conferncia) y otro 17.3 puntos y 6.8 rebotes durante dos periplos universitarios  de un año con no demasiado nivel en la liga. Huelga decir que los primeros números son los del alero de los Oklahoma City Thunder.

Después, el vacío

Estará usted pensando, crítico lector, ‘igual no necesitaron inflar a nadie, sino que resulta que este año van a llegar dos jugadores muy buenos y estás yendo aquí de listillo‘. Sí, podría ser, de hecho no es nada raro que el jugador que ha sido inflado durante meses luego no acabe siendo elegido en la primera posición del «NBA Draft«, sin ir más lejos lo vimos el año pasado con un Jahlil Okafor que acabó cayendo hasta la tercera posición. Es más, con suerte, de cada camada de jugadores que llega a la liga suele haber un par de ellos con potencial all-star y otros 5/10 con el de hacer una carrera de 10 años en la mejor liga de baloncesto del mundo.

Por poner el ejemplo del defenestrado «NBA Draft 2013«, para muchos el peor de la década, no creo que a nadie le sorprenda ver a C.J. McCollum anotando por encima de Giannis Antetokounmpo vistiendo las camisetas de East y West respectivamente en un par de años, mientras Kelly Olynyk, Michael Carter-Williams, Nerlens Noel, Dennis Schroeder y Mason Plumlee se hacen viejos en la liga. No voy ser cruel y sacar siquiera el ejemplo del año pasado con un Top-15 de jugadores que tuvieron hueco en la liga desde el pitido inicial, o el de hace dos años con un Top-7 que alberga a 5 potenciales All-Star.

Mientras que otros años a estas alturas del año ya tienes más o menos claro (luego siempre hay sorpresas tanto positivas como negativas) de quién puede ser all-star y quien tener un rol en la liga, este año solo ves a dos jugadores que sí que pueden acabar teniendo un hueco, seguido de un vacío que o bien se pasarán años en la D-League hasta estar lo suficientemente maduros, o que ya les imaginas rodando «Europ Trip 2» (peliculón en el que, por cierto, Matt Damon canta una canción preciosa). Es decir, de ver un Top-3 claro y otros 5 jugadores muy válidos, este año se ve a dos jugadores con potencial y un vacío de incertidumbres. No hay ninguno que no tenga más de un pero. No hay un jugador Top-20 del año pasado que no sería Top-3 durante este curso (quien venga con el nombre de Terry Rozier bajo el brazo que sepa que hay cosas que ya no duelen), en opinión de quien esto escribe, no hay nada.

Insisto, consulten los drafts de los últimos años y tendrán que llegar hasta el del año 2000 para encontrar un caso parecido.

Pobres Celtics y Sixers

¿Qué solución le queda a equipos como Philadelphia 76ers o Boston Celtics, que acumulan más de un 20% de las rondas? No les queda una sino tres. La primera es que sean lo suficientemente hábiles como para colocarlas todas en un traspaso a cambio de un jugador ya hecho, que es al parecer lo que están intentando los de Massachusetts; la segunda es hacerse con jugadores europeos y tenerles madurando en Europa, algo que ya han hecho con anterioridad los de la ciudad del amor fraternal; la tercera y última es rezar para que haya un terremoto y no se celebre la ceremonia.

Hay que decir que esta última es la menos probable.

 

ACTUALIZACIÓN TRAS EL FESTIVAL DEL HUMOR EN TWITTER

Ya sé que el periodismo deportivo al que estamos habituados suele estar protagonizado por gente más dada a afirmar cosas hasta el fin de los días que por alguien que intente contar las cosas de manera un poco diferente o bien lo haga así porque es profundamente idiota y/o no sabe hacerlo de otra manera. Bien, pues este último es mi caso. Así que tras ver que hay un gran número de gente que ha malinterpretado mis palabras, voy a aclarar dos puntos.

  1. Cuando digo lo de Nuevo LeBron XXX no quiero decir que todos los años se compare a alguien con LeBron, es la manera que tengo de expresar que todos los años inflan a un jugador desde el primer momento. Evidentemente, nadie comparó a Oladipo con LeBron durante su periplo en la NCAA como nadie lo hizo el año pasado con Okafor, pero sí que se utilizaron otras comparaciones similares. Si he usado lo de Nuevo LeBron para todo, es porque pensaba que el lector, cómplice, me iba a comprar la licencia. Al que lo haya hecho: gracias. A los que no: disculpas y jamás te acerques a Pessoa.
  1. Kevin Durant es, a bote pronto, el jugador franquicia de un equipo que ha jugado las finales de la NBA, MVP de la liga, MVP del Mundial de Baloncesto 2010 (que ganó) y campeón de unas olimpiadas. Creo que decir que Brandon Ingram no tiene potencial de ser un Durant no es minusvalorar al jugador, precisamente; sino que es solo expresar que no le distingo el potencial para ser todo eso que he puesto arriba,

Por último, agradecer la lectura de lo que recuerdo, es una opinión y creo que bastante argumentada. Así que antes de hablar de titula exagerado, por qué no hacer el ejercicio que recomiendo en el artículo y repasar los «NBA Drafts» desde el año 2000 hasta ahora. Además de echar un buen rato viendo las locuras que han hecho algunas franquicias, descubrirás que hay pocos – ninguno en mi opinión – con tan poca calidad como el actual.