A muy pocas alegrías están acostumbrados los aficionados de Los Angeles Lakers esta temporada: la huída de Dwight Howard, las lesiones de Steve Nash, Kobe Bryant y prácticamente la totalidad de los efectivos y, sobre todo, la marcha de un equipo que no levanta cabeza.
Los Lakers han sufrido la mayor derrota de su historia al caer derrotados por la friolera de 48 puntos ante Los Angeles Clippers, vecinos y eternos enemigos, por si la aplastante derrota fuese poco sencilla de digerir.
A pesar de un primer cuarto igualado, los Clippers no tardaron en dejar constancia de su superioridad marchándose al descanso con una renta de 35 puntos, tras un segundo cuarto paupérrimo de Lakers (13 puntos).
La derrota pudo ser aún peor y es que los visitantes llegaron a colocarse con 51 puntos de ventaja. Los Lakers por orgullo intentaron, sin mucho éxito, rebajar esta diferencia y finalmente el electrónico del Staples Center reflejaría un marcador de 94-142. Estos 48 puntos de diferencia suponen la mayor derrota de la franquicia, superando la cosechada en Portland, en 1995, cuando cayeron por 46 puntos (129-83).
Además, esta estrepitosa caída conlleva otra noticia negativa para Lakers, y es que los de púrpura y oro se colocan con el peor record de la Conferencia Oeste (21-41).
Tras el partido, el gran ausente de la cita, Kobe Bryant twitteo:
“Miseria = Motivación #Gracias #Denada“
Una “declaración” con la que dejará a pocos indiferentes, retratando la impotencia que sufre la estrella de los angelinos desde la grada, y el ansia que tiene un ganador nato por volver a las canchas y ayudar al equipo.
Ahora queda acabar la temporada lo más dignamente y, para este verano, se espera mucho movimiento desde los despachos -tal vez una gran reconstrucción-, quién sabe si un reemplazo en el banquillo y conseguir una buena ronda para un prometedor draft con el que llevarse a algún novato que pueda estimular a un equipo y a una afición falta de alegrías.
@antonid57
